Sant Antoni presenta indicios de un cambio en su modelo turístico por primera vez en décadas. Así lo afirma el alcalde, Josep Tur, quien alude tanto a acciones impulsadas por su propio equipo de gobierno, como al esfuerzo de empresarios (sobre todo hoteleros) para elevar la calidad y categoría de sus establecimientos. Usando un símil náutico, Tur afirma que Sant Antoni "llevaba un rumbo equivocado, pero al ser un barco muy grande, necesita tiempo para cambiar el rumbo".

¿Qué balance hace el Ayuntamiento de la limitación de horarios implantada en el West End este verano para reducir el nivel de ruido?

Todavía no tenemos los datos definitivos, pero por los avances de lo que disponemos parece que ha habido una mejora importante. No tan importante como sería necesario, pero sí se ha notado que vamos por buen camino. Hemos colocado más sensores en otras calles del entorno para ver si se ha de limitar el ruido en otros sitios. Si es aconsejable hacerlo, lo haremos. Hemos de mejorar más.

¿La intención es extender las limitaciones de horarios a más calles?

Faltan los datos definitivos, pero es probable que, por ejemplo, se incorpore también la calle del Mar, que no estaba incluida, porque tenía la dificultad añadida de que allí hay tráfico y en las otras calles no. Tendría las mismas limitaciones de horarios y de ruido que la zona del West.

¿Cómo ha visto la reacción de los empresarios de bares a las limitaciones de ese horario?

Reaccionaron de un modo fuera de lugar, sobre todo en el pleno donde se aprobaron estas medidas. Pero la opinión mayoritaria que me llega a mí desde los vecinos de Sant Antoni es que hemos de seguir por este camino. Estamos contentos con estas medidas, porque permiten un descanso en el entorno del West. En el censo municipal hay 503 personas censadas allí, es un número importante. Hemos de saber compaginar el negocio de los empresarios con el derecho al descanso de los vecinos.

¿Ve razones para pensar en el inicio de un nuevo modelo turístico en Sant Antoni o es prematuro hablar de ello?

Entiendo que hay pruebas ya fiables que demuestran que estamos cambiando el modelo. Uno de esos datos sería que hay bastantes hoteles que han hecho mejoras y están teniendo otro turismo. Otro dato positivo es que Thomas Cook ha decidido eliminar el Club 18-30 y ya no vendrá más a Ibiza. Entiendo que es una noticia para Sant Antoni. Ya no había muchos establecimientos que alojaran a estos turistas, pero está bien que no vengan. Es un mercado que no conviene a nadie. No queremos este turismo que, en muchos casos, con lo que bebe, lo que rompe y lo que molesta, causa más problemas de los ingresos que deja. Por tanto, hemos de buscar un turismo más sostenible.

Uno de los hoteles que van a modernizarse y aumentar de categoría va a ser el Piscis Park. ¿Existen más solicitudes parecidas de otros hoteles del pueblo?

Sí, hay más peticiones. El propio presidente de los hoteleros de Sant Antoni habló de 40 millones de inversión en mejora de establecimientos en el pueblo.

Parece que la propiedad del Piscis Park, el Grupo Playasol, quiere añadir ahora un spa y un gimnasio al proyecto inicial. ¿Retrasará esta modificación el inicio de las obras?

Esperamos que no. Pese a las dificultades que tenemos en Urbanismo para ir tramitando licencias, tenemos claro que hemos de facilitar las cosas y conceder el permiso lo antes posible. Esto es simplemente una modificación que no ha de retrasar la licencia.

La nueva contrata de basura ha entrado ya plenamente en vigor, pero siguen proliferando denuncias sobre focos de suciedad.

Ha mejorado y aún ha de mejorar más. Se han cambiado contenedores y se ha variado la ubicación de algunos. Es un proceso lento. Lo que me dicen y lo que yo veo es que ha mejorado. Aunque yo querría que aún estuviera mejor. Y hay contratada una empresa externa de control que se ocupa de vigilar que, cuando haya incumplimientos, se le descontarán a la adjudicataria de la factura mensual. Son penalizaciones que a nadie le gustan.

En relación a la nueva contrata de gestión del agua, usted afirmó en el último pleno que el PP quería favorecer a una empresa concreta. ¿Qué pruebas tiene de que el PP quiera favorecer a Aqualia?

No, yo dije que parecía esto. Cuando hay una empresa concreta cuyos argumentos coinciden exactamente con los que luego usa un partido concreto, pues es una coincidencia que sorprende. Es un contrato transparente, hecho de acuerdo con la ley, con libre concurrencia. Si no se está de acuerdo, se pueden hacer alegaciones (ninguna empresa las ha presentado), pero lo que no parece correcto es que se quieran cambiar las reglas de juego cuando el partido ya está casi acabado. Pero, sobre todo, me sorprende que se ponga en duda el trabajo que ha hecho la mesa de contratación, formada por técnicos. Y quiero aclarar que mis críticas se dirigían al PP de Sant Antoni, tengo un total respeto por los alcaldes de otros municipios.

En el tema de la Policía Local y el caso Verdugo, mucha gente se pregunta si la actuación de este jefe es una venganza contra el equipo de gobierno por haberle puesto una nueva directora técnica de seguridad o es que realmente hay un acoso contra él, según él denuncia...

Cuando nosotros entramos en el Ayuntamiento, ya llevábamos en el programa un cambio de forma de actuar en la Policía Local y un cumplimiento de las ordenanzas municipales. Eso implica mucho trabajo para la Policía Local. Por eso, vimos la necesidad de contratar a una asesora externa del ramo que nos pudiera ayudar. Aquí fue cuando empezó a haber denuncias por este señor, que yo nunca he entendido. El Tribunal Superior de Justicia ha dictado sentencia diciendo que el contrato de la directora técnica es correcto. Lo que pretendemos es mejorar el funcionamiento de la Policía. Sobre las actuaciones de acoso, a mí no me consta nada de eso, y además yo no lo habría permitido.

¿A qué atribuye entonces las denuncias de Verdugo?

No lo sé. Es difícil de entender que el jefe de un departamento ponga denuncias contra la presidencia de su empresa. Me cuesta entenderlo. No sé explicarlo.

¿Qué impresión le ha dado al alcalde de Sant Antoni ver cómo Joan Pantaleoni, que ha sido concejal de Gobernación de este Ayuntamiento, con el PP, se ve involucrado en una red de vendedores ambulantes?

A mí de verdad me sorprende que aquél que debería ser el primero en colaborar para resolver estas cuestiones, dé cobertura a los vendedores ambulantes, cuando él mismo es el primero que critica esta actividad. Lo que necesitamos como ayuntamiento es colaboración, no situaciones como la de este señor, que por una parte nos critica y por otra da cobertura a la venta ambulante. Esta persona fue el responsable de la Policía Local y de perseguir la venta ambulante y luego resulta que da refugio a los vendedores ambulantes.

¿Qué balance hace de este mandato, en el que ha gobernando con otros dos partidos, Reinicia y el PI?

La verdad es que se ha hecho un gran trabajo y hemos trabajado todos juntos. Aparte del nuevo contrato de residuos y el de aguas, estamos a punto de firmar el contrato de mantenimiento de alumbrado público. Se ha hecho el Plan Estratégico, con el que hemos logrado una ayuda del Consell de 1,5 millones para hacer proyectos. El nuevo edificio social y cultural de Sant Antoni es otra inversión importante. Se ha hecho el control de accesos a Cala Salada y fuimos los primeros en este tema. También se ha mejorado la accesibilidad al pueblo... Claramente se ha iniciado una nueva dinámica.

¿Son suficientes cuatro años para completar sus proyectos?

No, no son suficientes. Durante muchos años estuvimos siguiendo un rumbo equivocado, que nos ha llevado aquí donde estamos. Cuatro años no son suficientes. Si estoy yo, iremos en la misma línea y si no soy yo, espero que también se siga por ella.