637 candidatos se han presentado hoy en la Universitat de les Illes Balears ( UIB) para examinarse de las primeras plazas sacadas a oposición por el Servei de Salut. En total, 600 personas se han presentado para optar a una de las 91 plazas de técnico en radiodiagnóstico y 37 para las 2 plaza de técnico en radioterapia. De este modo, las oposiciones empiezan lejos de los augurios de que la nueva exigencia del catalán disuadiría a los profesionales para poder cubrir las plazas del personal sanitario.

De hecho, se han presentado numerosos profesionales de toda España a pesar de que las pruebas de hoy coinciden con las oposiciones al personal sanitario en Andalucía. "Si saco la plaza y tengo que aprender catalán, lo aprendo. Tengo dos años para sacármelo, no tengo ningún problema", dice Adrián González, que ha venido de Galicia junto a otros compañeros a la prueba, que asienten con la cabeza mientras le escuchan.

"No me importa si me lo tengo que sacar", asegura por su parte Mónica Moreno, llegada de Extremadura. "No te piden tanto, es sólo un B1, ya me lo sacaré", señala esta opositora extremeña, mucho más preocupada por el examen, si bien asegura que "depende de lo preparado que llegues. Ya veremos qué pasa".

Es el sentir general. "No es ningún problema, tienes dos años para sacarte un B1", asegura Verónica Ozón, de Galicia, que, no obstante, confiesa que se presenta a las pruebas en Baleares "como primera toma de contacto con unas oposiciones". "Es la primera vez que me presento, luego me presentaré a las de Galicia". Eso sí, si supera aquí la prueba, se queda. "Sí, claro", no duda un segundo.

"Primero tengo que sacar la plaza, si la saco lo tendré que aprender, qué remedio", apunta Germán, de Toledo. "Pero si nos lo hubieran pedido para presentarnos a la prueba no me habría podido presentar", celebra que la exigencia sea a partir de los dos años. Ahora toca la prueba. "Estoy tranquilo, no muy nervioso, ya llevo unas cuantas", comparte.

Más allá de los que han venido de fuera, numerosos interinos de las islas también se han examinado hoy, la mayoría asegura que ya tiene el título de catalán. "Puede que seamos el 85 por ciento de los que se presentan", explican en un corrillo que han montado previamente al examen a las puertas del edificio Jovellanos de la UIB. "Nos presentamos con nervios e indignación", denuncian sin embargo. "No es normal que en 18 años sean las primeras oposiciones. Hay gente que lleva hasta 20 años de interino y ahora se quedará sin plaza", critican, y justifican el motivo por el que incluso han decidido impugnar la prueba. "Dicen que dan estabilidad pero son un recorte", aseguran a minutos de entrar en las aulas.

Para el director general del IB-Salut, Juli Fuster, éstos son sólo "una pequeña parte". "Nunca ha habido una sentencia que haya impedido unas oposiciones, así que hemos de tirar adelante", asegura Fuster, que destaca que desde 2009 no se habían convocado y que se ha presentado "mucha gente de fuera". "El hecho de que no haya habido oposiciones en tantos años hace que tengamos una de las tasas más altas de interinos", explica, para asegurar que "con estas oposiciones el objetivo es bajar esa tasa de interinos por debajo del 8 por ciento"..

En total, en los próximos dos años serán 5.113 plazas las que sacará escalonadamente el Govern a oposición para las que, en contra de los augurios de que la exigencia del catalán sería disuasoria, se han presentado 18.770 solicitudes de profesionales sanitarios de toda España. La próxima prueba será el próximo domingo, 28 se octubre, y se presentan 634 personas para 147 plazas de técnico en anatomía patológica y en laboratorio.