El juzgado de lo Penal número 2 de León ordenó ayer la detención del belga Christian C., el hombre acusado de maltratar e inducir al suicidio a Sara Calleja, que se quitó la vida en Ibiza en julio de 2015. Christian C. estaba citado ayer por el juzgado de León para la celebración de dos juicios, ambos por amenazas y coacciones y derivados de los mensajes que el acusado, que reside en Bélgica, envió a Calleja a lo largo de los años 2013 y 2014, cuando ya la justicia había dictado órdenes de alejamiento y de prohibición de comunicación.

Según explicaron fuentes jurídicas, el ministerio público reclama para el belga penas inferiores a dos años de prisión en ambos juicios por coacciones y amenazas y, en consecuencia, las vistas se podrían haber llevado a cabo sin la presencia del acusado. Sin embargo, la acusación particular, que ejerce la familia de Calleja, reclama penas de prisión de más de dos años, ya que acusan al belga por coacciones, amenazas e inducción al suicidio. La acusación particular reclamó ayer en el juzgado leonés la comparecencia del belga, cuya ausencia justificó su abogado con un informe psiquiátrico que, al parecer, advierte de que el acusado se encuentra en tratamiento y hospitalizado. Finalmente, el juzgado decidió pedir la detención de Christian C. a través de una comisión rogatoria.

Este hombre ya fue condenado, en 2014, por amenazas en el ámbito familiar por el caso de Calleja, con quien estableció comunicación a través de internet pese a que tenía prohibido comunicarse con ella.

A finales del año pasado fue absuelto de una de las causas que se siguen contra él en León y en la que la Fiscalía pedía dos años de cárcel. Entonces la jueza consideró que su responsabilidad criminal estaba extinguida, puesto que ya había sido juzgado y condenado por esos hechos.

En un auto judicial dictado el 20 de diciembre del año pasado, la jueza del Juzgado de lo Penal número 2 de León determinó que los hechos del procedimiento que se refieren a los mensajes recibidos por la víctima entre el 5 y el 15 de diciembre de 2013 ya estaban juzgados. Éstos «ya fueron contemplados en los hechos probados de la sentencia condenatoria 250/2014 de fecha 16 de junio de 2014, pues la misma se refiere a 622 mensajes desde diciembre de 2013 hasta marzo de 2014», dictó la jueza leonesa.

En Ibiza

Caso diferente es el procedimiento abierto en el Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Ibiza, en el que Christian C. se enfrenta por el momento a siete años de prisión que reclama la Fiscalía por el acoso al que, supuestamente, sometió a Calleja durante el tiempo que ella vivió en la isla, de diciembre de 2014 hasta que se quitó la vida siete meses después.

En Ibiza el belga está acusado por tres delitos: uno de maltrato psíquico habitual y otros dos continuados de coacciones y quebrantamiento de condena. El ministerio público sostiene que el acusado envió hasta 12 paquetes postales a su víctima, la telefoneaba, le envía mensajes de móvil y correos electrónicos y hacía comentarios en redes sociales, lo que generó una situación de acoso «constante, incesante y persistente» en ella, que derivó en una depresión y su suicidio.