La mesa de contratación para la gestión del abastecimiento de agua potable y saneamiento del municipio de Sant Antoni ratificó ayer la máxima puntuación obtenida por Facsa (Fomento Agrícola Castellonense Sociedad Anónima) en ese concurso (85,76), por delante de Acciona (85,15), FCC Aqualia (83,21), Socamex (68,08), Global Omnium (59,39), Inima-Vectoris-Parrot (57,21) e Hidrobal (52,09). El siguiente paso de esa licitación será la aprobación en el pleno de la Corporación de la oferta económica más ventajosa, la de Facsa, que tendrá varios días de plazo para presentar la documentación necesaria. Luego volverá a pasar por pleno para su adjudicación, aunque las empresas que participaron en el concurso aún dispondrán de un periodo para presentar alegaciones.

Antes de validar ayer esa máxima puntuación, la mesa de contratación descartó suspender el procedimiento de contratación, tal como reclamó FCC Aqualia mediante un escrito entrado en el registro del Consistorio la tarde del miércoles. FCC Aqualia, actual responsable del abastecimiento del agua en ese municipio, asegura en ese documento tener «sospechas fundadas de la presunta comisión en el seno de esta licitación de una actividad presuntamente delictiva de revelación de secretos empresariales y plagio en la formulación de la oferta mejor clasificada».

FCC Aqualia señala a uno de sus antiguos empleados -del que aporta nombre y apellidos y detalla que era el anterior responsable técnico del servicio municipal de aguas de Sant Antoni y del resto de la delegación de Balears- como autor de ese posible espionaje industrial. La empresa «sospecha» que ese trabajador pasó información relevante a Facsa durante el periodo de «presentación de ofertas y apertura de plicas», justo cuando se «incorporó laboralmente» a la sociedad anónima castellonense. Sus «sospechas» (no adjuntó las pruebas en el escrito) se basan en las «numerosas y reiteradas llamadas telefónicas», un total de 13, entre ese empleado y los directivos de Facsa «en los meses previos al anuncio de la licitación en el perfil del contratante» y de «otros hallazgos» que asegura que está «obteniendo», así como de «indicios racionales» que anuncia que serán expuestos en su momento.

Motivos no tasados en la Ley

Motivos no tasados en la LeyEl alcalde de Sant Antoni, Pep Tur, Cires, explicó que la mesa de contratación, reunida ayer a mediodía, había «confirmado las puntuaciones» del concurso tras descartar la petición de suspender la contratación formulada por FCC Aqualia: «Los motivos que alega no están tasados en la Ley de Contratos del Sector Público, no están previstos; esa ley incluye una serie de causas para la suspensión, pero ninguna de las que alega Aqualia figura entre ellas», indicó. Los servicios jurídicos municipales estudiaron el escrito remitido por FCC Aqualia y decidieron que «la mesa de contratación no debía tener en cuenta ninguno de los motivos expuestos».

Pep Tur considera que «se trata de un problema entre Aqualia y uno de sus empleados, que no tiene que ver con el Ayuntamiento» y que, en todo caso, «deberá dirimirse por parte de la Justicia, si lo cree Aqualia oportuno».

La mesa de contratación «elaborará hoy [por ayer] un acta en la que constará» por qué no aceptó suspender el procedimiento de contratación, tal como pedía FCC Aqualia. Hoy «será colgada en el portal de transparencia, de la misma manera que ha estado colgado todo el proceso de contratación», subrayó Tur.

Trabajador «desleal»

Trabajador «desleal»

El alcalde insistió en que «al Ayuntamiento no le compete ese problema» entre FCC Aqualia y su exempleado: «Es un asunto que han tenido con un trabajador que parece que ha sido desleal. Ahí no podemos entrar nosotros, pues no somos jueces ni es nuestra función ni es una circunstancia prevista y tasada en la ley para suspender una mesa de contratación».

«Este -remarcó Pep Tur- ha sido un concurso abierto, con libre competencia y con unas condiciones previas administrativas contra las que, si alguna de las empresas entendía que no eran legales, podían alegar, pero todas aceptaron las reglas del juego».

Precisamente, el alcalde subrayó que «al hacerse como marca la ley, mediante un concurso abierto y por libre concurrencia, las ofertas han sido mucho mejores que la prórroga que Aqualia presentó al Consistorio en el año 2014». Aqualia propuso entonces prorrogar 20 años el contrato: «Ofrecía cinco millones de euros de canon. Ahora, en el concurso, han ofertado el doble. Lo que Aqualia propuso para prorrogar el contrato, suponía a su término un beneficio de 10,6 millones de euros para el Consistorio. Pero la mejor oferta del concurso actual ofrece 38,6 millones de beneficio para el Ayuntamiento cuando acabe la concesión», explicó ayer el alcalde.

Cabe recordar que el Consistorio de Santa Eulària aceptó este verano prorrogar la concesión de ese mismo servicio hasta 2025, en vez de convocar un concurso como el de Sant Antoni.