El proyecto 'Ibiza, Turismo Inteligente y Sostenible' del Consell insular ha sido seleccionado por el organismo estatal Red.es para otorgarle una subvención del 60% a licitar y ejecutar en dos años. En total, supondrá una inversión de 5.990.601 euros, de los que Red.es aportará 3.594.360 euros. El resto lo pondrá el Consell. Este proyecto está enfocado a convertir Ibiza en una isla 'inteligente'.

Para ello está previsto el despliege de una red de sensores por toda la isla y múltiples servicios en diferentes ámbitos. La información recogida por dichos sensores se enviará de forma inalámbrica a un centro de control que se habilitará en uno de los pabellones del antiguo acuartelamiento de Sa Coma. La adecuación de dicha instalación se encuentra actualmente en licitación y será ejecutada en los próximos meses. El presidente del Consell, Vicent Torres, explicó que se trata de «impulsar el uso de las nuevas tecnologías para el turismo y la sostenibilidad del territorio». «Esto pondrá a Ibiza a la vanguardia de España», afirmó.

El proyecto se centra en seis áreas. La primera y «más importasnte», según la vicepresidenta Viviana de Sans, se centrará en las infraestructuras necesarias para llevar a cabo el proyecto. Es decir, en la instalación de la red de sensores, enlaces de comunicación y la estructura de recepción y procesamiento de datos en Sa Coma. En ese centro estarán integtrados todos los servicios de emergencias de la isla.

La segunda línea de acción es la información de cara al visitante. Con la creación de una app móvil en la que se ofrecerán datos de transporte; horas de llegada de autobuses a las paradas vía GPS; del tráfico rodado; sobre la calidad de las aguas de las playas (empezando por cinco de ellas: Talamanca, Platja d'en Bossa, ses Salines, Santa Eulària y Benirràs), y de los parkings disuasorios y su ocupación.

La tercera es la detección temprana de incendios forestales. Para ello se instalarán tres cámaras optrónicas (combinación de cámara térmica y otra convencional), situadas en sa Talaia de Sant Josep, Sant Llorenç y Sant Joan.

La cuarta es la monitorización de la calidad del agua de las playas con una serie de boyas capaces de controlar la temperatura, masificación o vertidos, entre otras variables.

La quinta es la relacionada con la monitorización del transporte y el tráfico. Y la sexta, la geolocalización de 2.500 viviendas aisladas. Éstas recibirán una placa que en contacto con el móvil dará la alarma en el centro de mando con datos como la mejor ruta para llegar y la anchura del camino, para que los servicios antiincendios sepan qué camión llevar.