Representantes de los taxistas de Ibiza exigen una mayor presencia policial en las paradas de taxi, sobre todo en la avenida de Bartomeu de Roselló, y en las de establecimientos de ocio nocturno, donde se concentra una gran parte de conductores pirata. Los taxistas expresaron esta reclamación en una reunión contra el intrusismo en el sector en el Consell.

Además, el director insular del Estado, Ramón Roca, y la consellera insular de Movilidad, Pepa Marí, anunciaron la elaboración de un código de buenas prácticas para implicar al sector turístico contra el intrusismo. El objetivo de esta iniciativa es que los establecimientos conozcan qué pueden hacer contra el transporte ilegal y que sirva para formar a los empleados. «Queremos dar a los empresarios una herramienta para que puedan participar activamente contra los conductores ilegales», sostuvo Marí.

Tras el encuentro (al que asistieron representantes de la Federación insular del Taxi de Ibiza, de la patronal hotelera y de la Asociación de Ocio Nocturno y las concejalas de Gobernación de todos los municipios de la isla excepto Sant Joan), el representante de Élite Corsaris, Serafín Costa, valoró que se involucre al sector turístico en la lucha contra el transporte ilegal, pero calificó esta reunión como «un paripé». «Ha sido una pérdida de tiempo excepto por la intervención del director insular, quien ha asegurado que se puede denunciar penalmente a los piratas cuya actividad esté asociada a la venta de drogas y a la prostitución», manifestó Costa.

Asimismo, añadió que «hay más ilegales que ningún otro año». «Hay más taxis legales, pero el doble de piratas que el año pasado. Han dejado de trabajar tanto en el aeropuerto gracias a la Guardia Civil [ha intervenido al menos 70 vehículos este verano], pero han aumentado en las paradas de discotecas y en la avenida de Bartomeu de Roselló de Ibiza», afirmó este taxista de Élite Corsaris. «Pedimos más presencia policial en las paradas de taxi en horas punta [cuando cierran los establecimientos de ocio] para disuadir a los piratas de que ofrezcan sus servicios», insistió el portavoz de Élite Corsaris.

Erradicar la oferta ilegal

En la misma línea que Costa se manifestó el presidente de la Federación Insular del Taxi (Fitie), Alejandro Cardell, que añadió que espera que las nuevas medidas [en referencia al código de buenas prácticas y a la colaboración con los hoteleros] den «sus frutos», aunque insistió en que su principal lucha es la erradicación de la oferta ilegal en el transporte.

Tanto Costa como Cardell lamentaron la ausencia de representantes de las empresas de alquiler de coches y el director insular del Estado en las Pitiüses respondió que estaban invitados, ya que los rent a car « de la lucha contra el intrusismo». «Es necesario que las empresas de alquiler de coches actúen con responsabilidad y que cuando tengan conocimiento de que un cliente pueda ser un taxista pirata no le alquilen el coche. Unos lo hacen y otros no», señaló Roca.

Marí, por su parte, remarcó el aumento de taxis estacionales este verano para satisfacer la demanda, y así «quitar espacio a los intrusos», y las actuaciones de la Guardia Civil en el aeropuerto, entre otras medidas para luchar contra el intrusismo en el sector.