Las asociaciones ecologistas y de pequeña y mediana empresa agrupadas en la plataforma 'Por un mar sin plástico' reprocharon ayer a las patronales CAEB, Federación Hotelera y de grandes superficies sus críticas a la Ley de Residuos que tramita el Parlament balear. Amics de la Terra, Greenpeace, GEN-GOB, Fundación Deixalles, Rezero, Retorna, Pimeco y Recircula, miembros de la plataforma, aseguraron ayer que las empresas que han criticado dicha ley tienen «muy poca representatividad» en Balears.

Para las entidades ecologistas, la norma supone el inicio de un cambio de modelo en la gestión de residuos apostando «fuertemente» por la prevención y la gestión eficiente, con claros objetivos hacia la reutilización, «aspectos claves hasta ahora olvidados en el marco normativo de gestión de residuos insular». «Esta ley tiene el potencial de convertirse en un logro para el Estado español y Europa en la lucha contra la contaminación por plásticos y puede servir de ejemplo para otras regiones y países del Mediterráneo y Europa. Esto, es evidente, incomoda a determinados sectores económicos que se oponen a la iniciativa», manifestaron en un comunicado.

Según la plataforma, la nueva ley es «pionera» en el ámbito europeo en relación a la implantación de medidas de prevención, como la prohibición de determinados envases de un solo uso, la reducción del despilfarro alimentario o la devolución y retorno de envases, entre otras cosas.

Un millón de envases

Así, explicaron, representantes del comercio local apoyan la norma ya que «asegura un futuro más sostenible para las islas y fomenta el consumo de proximidad». Según aseguraron, en Balears cada día se pierden un millón de envases de bebidas que terminan contaminando el entorno, especialmente el Mediterráneo. «El tema es especialmente preocupante con los envases de plástico», reiteraron.

De hecho, la plataforma denunció que al oeste de Mallorca y en Ibiza hay dos grandes concentraciones de plásticos con una media de contaminación 30 veces superior a la tasa registrada en el resto del Mediterráneo. Las entidades animaron al Govern a seguir adelante con la Ley «que debe marcar el cambio de rumbo definitivo hacia la optimización y sostenibilidad de la gestión de residuos en las islas».