El incendio de un aparato electrónico de un pasajero provocó ayer la evacuación de emergencia de un avión de la compañía Ryanair en el aeropuerto de Barcelona El Prat con rumbo a Ibiza. En el desalojo de la aeronave no se produjo ningún herido, a pesar de que los pasajeros tuvieron que salir del avión por el tobogán hinchable de emergencia, situado en la proa de la aeronave.

Esta operación se llevó a cabo de una «forma segura», apunta la aerolínea en un comunicado, aunque en el vídeo publicado en diariodeibiza.es se puede ver la tensión que provocó la evacuación entre muchos pasajeros.

Los hechos tuvieron lugar por la tarde, cuando la aeronave ya se encontraba en pista para volar a la isla y esperaba el permiso para inicial el operativo de despegue. El aparato iba lleno.

Según un pasajero, el aparato incendiado era una batería externa de un teléfono móvil, propiedad de un chico de Nueva Zelanda.

Por su parte, la compañía Ryanair señaló en un comunicado que la causa había sido por el incendio de un teléfono móvil.

El incendio se pudo apagar enseguida, al detectar el humo la tripulación, pero pese a ello, se puso en marcha el protocolo de emergencia y se desalojó a todos los ocupantes.

Los pasajeros del vuelo fueron «evacuados de la aeronave de manera segura a la terminal» y la tripulación de cabina se hizo cargo del dispositivo incendiado.

La compañía reacomodó a los pasajeros en otro vuelo.