Dos de las principales organizaciones ecologistas de España y el mundo, Greenpeace y Oceana, alertaron ayer en Ibiza de la grave situación en que se halla esta planta submarina tanto en el Mediterráneo en general como en las Pitiusas en particular. También aplaudieron la aprobación del decreto de protección, el pasado viernes, por el Govern balear. De hecho, los ecologistas solicitaron que se apliquen normativas similares en toda la costa mediterránea para detener su destrucción.

En una rueda de prensa ofrecida a bordo del buque 'Esperanza' de Greenpeace, amarrado en el puerto de Ibiza, los responsables de esta entidad Pilar Marcos y Ana Martínez, junto con la de Oceana, Marta Madina; del GEN, Xisco Sobrado, y de Terraferida, Raquel Vaquer, explicaron que en todo el Mediterráneo se ha perdido en los últimos 50 años entre un 13% y un 38% de la cobertura de la posidonia, según ponen de manifiesto varios estudios científicos. Y aquellas praderas que permanecen han visto reducida su densidad en un 50%.

En el Parque Natural de ses Salines de Ibiza y Formentera, en concreto, se habría perdido un 20% de superficie de las praderas entre los años 2008 y 2012, según señaló Oceana.

También en la bahía de Palma, la posidonia se habría reducido en los últimos años, «por lo que es importante que el decreto frene estos impactos locales, más sencillos de evitar que los provocados por el cambio climático», explicó la científica marina de esta organización, Marta Carreras.

Según Oceana, otros estudios indican que debido al cambio climático se podría perder en el año 2050 el 75% de cobertura de las praderas de posidonia del Mediterráneo e incluso llegarían a desaparecer en 2100. «Es importante que las praderas estén fuertes y sanas para afrontar estos impactos», reiteró.

El GEN, Greenpeace, Oceana y Terraferida revelaron que «en Balears hay unas praderas muy grandes, que se calcula que podrían absorber el 7% de las emisiones de dióxido de carbono en las islas». El archipiélago cuenta actualmente con el 52% de todas las praderas de posidonia de España.

Dado que la aprobación del decreto del Govern balear se produce en plena temporada estival, con una afluencia masiva de yates recreativos, estas entidades solicitaron que su aplicación sea inmediata y se asegure una dotación suficiente de medios materiales y humanos para que las sanciones sean «efectivas desde el primer momento».

Estas organizaciones felicitaron a las instituciones, y en especial al Consell de Formentera, por la aprobación de un decreto «muy esperado».

Valor económico

En cuanto al valor económico que representan las praderas de posidonia, las organizaciones calcularon que una hectárea se traduce en unos 14.000 euros al año.

«En Balears hay 65.000 hectáreas. De este modo, cada año las praderas nos ofrecen en las islas unos 910 millones de euros. Dicho de otra manera, cada habitante de Balears recibe unos 810 euros al año de las praderas. Por ello, es muy importante que entre todos nos esforcemos en proteger este tesoro», reiteraron.

El representante del GEN celebró la aprobación del decreto, si bien «podría haber sido más valiente» a la hora de afrontar determinadas problemáticas.

También señaló que debería haber sido más «ambicioso» para abordar el problema de las aguas depuradas en Balears, con un calendario de actuaciones para lograr que las estaciones no viertan agua mal depurada al mar. Asimismo, consideró que es necesario aumentar los medios de vigilancia.

La portavoz de Greenpeace, Pilar Marcos, explicó que las entidades ecologistas realizan este fin de semana en las Pitiusas el primer muestreo social o crowdsourcing para dar visibilidad a las amenazas sobre la posidonia. Las organizaciones han invitado a todas las personas interesadas a que este fin de semana «denuncien la presencia de barcos fondeados sobre praderas de posidonia en aguas pitiusas», explicó Greenpeace. Por ahora, desde el 12 de julio, la organización del arco iris ha recibido más de 50 denuncias, principalmente por fondeos en ses Salines o Talamanca.

La actriz Inma Cuesta ha acompañado a las asociaciones ecologistas como 'guardiana de la posidonia' para destacar «la importancia de la concienciación y labor ambiental». Junto a Cuesta se encontraban en el 'Esperanza' los youtubers Melo Moreno (Yellow Mellow) y Jonan Wiergo, que divulgan la campaña a través de sus respectivos canales. La actriz Inma Cuesta dijo que «la posidonia es uno de los mayores tesoros del Mediterráneo. Es nuestro deber protegerla de los peligros a los que está sometida».