Mitchell A.L., el británico de 21 años detenido en Sant Antoni el pasado miércoles por dar varios puñetazos y causarle la muerte a Harry Kingsland, un compatriota de la misma edad, ingresó ayer en el centro penitenciario de Ibiza después de que la jueza de Instrucción número 1 dictara prisión provisional sin fianza y comunicada para él, según informó una portavoz del Tribunal Superior de Justicia de Balears (Tsjib).

La Guardia Civil trasladó a Mitchell A.L. ayer por la mañana, sobre las 8.15 horas, a la sede judicial de la avenida de Isidor Macabich de Ibiza para que prestase declaración ante la titular de Instrucción 1. El joven británico pasó dos noches en el calabozo del cuartel de ses Païsses tras ser detenido por la agresión mortal a Kingsland. El Instituto Armado le ha denunciado por un delito de homicidio, según informó ayer un portavoz de la Oficina Periférica de Comunicación (OPC) de la Benemérita de Balears.

Según indica el perfil de Facebook del fallecido, Kingsland nació y residía en Birmingham, Reino Unido, y había trabajado en British Gas. En la actualidad trabajaba en un establecimiento de ocio nocturno de Sant Antoni, al igual que su agresor, que declaró ante la jueza instructora sin camiseta, tal como fue arrestado por la Policía Local y la Guardia Civil. La muerte violenta de este británico ha causado una gran conmoción entre sus seres queridos y entre los trabajadores británicos, workers, de Sant Antoni. Numerosas personas han expresado en Facebook su dolor por la pérdida de este joven.

El suceso ocurrió el pasado miércoles por la mañana en un piso ubicado en la plaza de s'Era d'en Manyà, en el núcleo urbano de Sant Antoni. Varias personas se estaban peleando en una vivienda cuando un joven accedió a ella para intentar detener la trifulca. Cuando intervino otro británico le asestó varios puñetazos.

Un trabajador de la zona, que empezaba su turno a las 6 de la mañana, aseguró que escuchó «mucho más jaleo» de lo habitual en la vivienda. «El agresor le pegó por lo visto dos puñetazos o le dio con una botella y acto seguido saltó», detalló este testigo. A continuación, vio a una joven pidiendo ayuda y, posteriormente, apareció una ambulancia en la zona.

La víctima falleció tras entrar en parada cardiorrespiratoria, por lo que los sanitarios del 061 no pudieron hacer nada por salvar su vida, pese a los reiterados intentos de reanimación.

Drogas y alcohol en el piso

Drogas y alcohol en el piso

La Policía Local se presentó en el inmueble a las 7.40 horas tras ser avisada por trabajadores de la zona de que habían escuchado «más ruido de lo normal». Los agentes comprobaron que en el lugar de los hechos había numerosas botellas de alcohol y drogas. Antes de las 9 aparecieron los profesionales de Pompas Fúnebres, pero no retiraron el cadáver de Kingsland hasta pasadas las once y media de la mañana.

El agresor había saltado por el balcón del segundo piso de la vivienda e intentó huir, pero finalmente fue detenido en la rotonda de la entrada de Sant Antoni, conocida como la del 'Huevo de Colón'. La investigación de esta muerte violenta corre a cargo de la Policía Judicial del Instituto Armado.