La dirección de Aeropuertos Nacionales y Navegación Aérea (AENA) en Balears aseguró ayer que no tienen intención de mediar en el conflicto laboral que enfrenta al personal de seguridad del aeropuerto con Trablisa, la empresa subcontratada por el organismo semipúblico para gestionar este servicio. La plantilla ha convocado una huelga indefinida a partir del 20 de julio.

En un escueto comunicado, el organismo que gestiona los aeropuertos de interés general, entre ellos el de Ibiza, responde al respecto: «Es un tema entre los trabajadores y la empresa». El año pasado, AENA también decidió mantenerse al margen de las negociaciones entre la empresa y los representantes de los trabajadores para evitar una huelga que finalmente se llevó a cabo durante ocho días del mes de julio y que finalizó gracias, entre otras cosas, a la intervención de la La directora general de Trabajo del Govern balear, Isabel Castro.

En mayo del pasado año, la plantilla del servicio de limpieza de la terminal decidió desconvocar un paro después de conocer el acuerdo alcanzado entre AENA y la empresa subcontrada Kle en una reunión celebrada en Palma y por el que se procedería en unos días al pago de las mensualidades de abril y mayo, según confirmó entonces Miguel Pardo, secretario general de de la Federación de Construcción y Servicios de CCOO. Esta huelga se mantuvo durante una semana.

Por otra parte, y sobre la amenaza de huelga de los empleados de seguridad este verano, un portavoz del sindicato Comisiones Obreras (CC OO) denunció ayer la contratación de personal eventual para suplir al personal de seguridad en el aeropuerto durante los días durante los cuales se prolongue el paro convocado por el comité de empresa.

El sindicato explica además que esto es «ilegal» y señala que, desde hace unos días, los trabajadores han detectado en el aeropuerto esta práctica y así lo han comunicado al sindicato.

Negociación en 'stand by'

Asimismo, recuerda que el pasado viernes se celebró en el Tribunal de Arbitraje y Mediación de Balears una reunión con la empresa «en la que no se llegó a ningún acuerdo» y las «negociaciones están en stand by».

A falta de tres días, dicen, están dispuestos a seguir negociando aunque no obtienen respuestas por parte de la empresa.

El sindicato exige una vez más que los servicios mínimos sean como máximo del 50% y no del 90%, tal y como se pretende, «porque con ello quieren reventar la huelga».

«AENA tiene aquí el cien por cien de responsabilidad, junto a Trablisa, de lo que está pasando al permitir la precarización del sector. El aeropuerto en sí, en general, es una bomba de relojería», lamentan desde CCOO, y reiteran que el personal de tierra de Iberia o el de limpieza también han convocado paros. «Es un polvorín», insisten.