El futbolista neerlandés Quincy Promes, jugador del Spartak de Moscú, fue arrestado el pasado jueves por agentes del Cuerpo Nacional de Policía por agredir a su esposa, confirmaron ayer fuentes policiales.

Al parecer, el futbolista fue denunciado por agredir con los puños a su esposa, también de Países Bajos, por lo que fue arrestado y trasladado a la comisaría de la Policía Nacional.

Allí, en el calabozo, pasó la noche del jueves al viernes. Por la mañana fue conducido al juzgado de guardia. Ambos, el presunto agresor y su esposa, declararon ante la jueza de guardia. El acusado quedó en libertad con cargos mientras continúa la instrucción del caso.

Durante su estancia en los calabozos de la comisaría recibió la visita de su amigo Wesley Sneijder, el famoso centrocampista neerlandés, ya retirado. Sneijder viaja a Ibiza con frecuencia desde hace años.

Promes, Sneijder y sus respectivas parejas se encuentran de vacaciones en la isla. En comisaría, Promes, que juega en el Spartak de Moscú desde 2014, se mostró sorprendido por su detención pese a que reconoció haber pegado a su esposa.