Tan sólo un día después de que el director general del Servei General de Salut-Ib Salut, Juli Fuster, anunciase en el propio Hospital Can Misses que ayer se reabrirían los quirófanos donde se detectaron moscas, el servicio de Microbiología alertó de la proliferación de un hongo que obligaba a cerrarlos de nuevo. Un portavoz del Ib-Salut afirmó a este diario que no fue «precipitado» abrir los quirófanos porque contaban con un informe que avalaba su decisión.

Además, el mismo portavoz explicó que se volverán a tomar muestras. Los resultados del nuevo cultivo se conocerán a finales de esta semana.

El cierre de los quirófanos provocó un profundo malestar entre los profesionales por tener que reprogramar otra vez las citas para los pacientes pendientes de una operación, después de que se anunciase que se retomaba la actividad quirúrgica en Can Misses. l