El fotógrafo Alfredo Benito Guijarro, afincado en Eivissa desde hace décadas y antiguo colaborador de Diario de Ibiza, ha fallecido esta tarde en su casa de Can Llaudis, en Sant Antoni, a los 101 años edad, acompañado de su familia. Nacido en 1916 en la localidad segoviana de Carabias, Benito fue el primer fotoperiodista con carnet en España, después de titularse en la Escuela Oficial de Periodismo de Madrid.

En 1942 ingresó en el diario Marca, con el que hizo prácticamente toda su carrera. Cubrió tres Juegos Olímpicos y fue el autor de una de las fotos más recordadas de la historia de la fotografía deportiva española, la de Marcelino marcando el gol definitivo a la URSS y dándole el triunfo a España en la final de la Eurocopa de 1964.

Durante años compaginó el trabajo en Marca, del que llegó a ser jefe de fotografía, con otro en la revista Triunfo, para la que retrató a los escritores, actores, intelectuales o cantantes más conocidos de los años 50 y 60. También colaboró con otras cabeceras, como Mundo Hispánico o Deporte 2000, además de con el Consejo Superior de Deportes y con federaciones deportivas; de hecho, tiene premios de varias de ellas.

Su última gran cita deportiva fue el Mundial de España de 1982, por la que retrasó su jubilación. Esta le llegó en 1984 y poco después se instaló en Ibiza, donde ya vivían dos de sus hijas. En 1989 se presentó en el desaparecido diario la Prensa de Ibiza dispuesto a echar una mano y comenzó una colaboración que seguiría durante años primero en La Prensa y después en Diario de Ibiza, con el que colaboró durante más de dos décadas, hasta que se retiró definitivamente a los 90 años.

A lo largo de su trayectoria recibió numerosos reconocimientos, es miembro de honor de la Asociación de la Prensa de Madrid (APM), de la que forma parte desde 1952 y en la que figura como asociado número 6 y, entre otros, recibió el Premio de la Comunicación 2006, que otorga la Asociación de Periodistas, Publicitarios y Relaciones Públicas de Balears. En octubre del año pasado con motivo de su centenario, recibió el reconocimiento del Ayuntamiento de Sant Antoni y de sus compañeros de Diario de Ibiza.

Un ilustre en la redacción

En es Diari, y anteriormente en La Prensa de Ibiza, Alfredo Benito fue el encargado de ordenar, archivar y documentar el archivo de fotografía, una labor ingente que cumplía y hacía cumplir a los redactores con riguroso celo y con gran cariño. Su experiencia, su ingenio y su mirada crítica fueron un acicate y un ejemplo para muchos profesionales de la isla que compartieron con él aquellos años. Su fina ironía y su fuerte carácter siempre se dejaron notar en la redacción.

En una entrevista a este medio en el año 2006, Benito se definía como un fotógrafo "discreto y coherente". "Nunca he querido perjudicar a nadie en mi vida. Igual que a los Reyes no se les podía retratar con un vaso en la mano, pues a los jugadores de fútbol tampoco lo hacía", comentaba el fotógrafo. Así era Alfredo Benito, un fotógrafo humilde y coherente.