¿Se encuentra ya plenamente recuperado del ictus que sufrió a principios del verano?

No al cien por cien, pero casi. Dicen que la recuperación precisa entre seis meses y un año. Para algunos temas de fuera del Consell, aún me lo tengo que pensar un poco.

¿Ha sufrido mucho desde fuera durante su recuperación?

No, porque he sido informado de todo. Los consellers me llevaban el trabajo a casa. He participado en todo, salvo en la aprobación de algunas leyes en el Parlament.

¿Ha habido problemas de mando o desavenencias entre los socios durante su ausencia?

No, ningún problema.

¿Le preocupaba?

No, porque yo veía que cada día me iba recuperando. Con el ictus, inicialmente perdí el habla. Sabía lo que quería decir pero me costaba expresarlo. Con el trabajo que me llevaron a casa, ningún asunto ha sufrido un retraso.

¿Ha sido muy duro para usted el proceso de recuperación?

No, a ver... Un día vas a pasar un domingo en barco con unos amigos y, tras una inmersión de dos metros y medio de profundidad, ves que has perdido el habla? Yo he recuperado el castellano y el catalán, pero hay otros idiomas con los que estoy luchando. No me hallo tan seguro, en el uso de estos idiomas, como antes.

Después del ictus, ¿han cambiado sus prioridades en la vida?

En 2014 sufrí una afección cardíaca. En ese momento ya me planteé qué podía pasar en el futuro, porque cuando te sometes a una operación no sabes cómo irá. En ese momento di prioridad sobre todo a mi vida, y también a mi trabajo en política, al que, ante las elecciones de 2015, ya me dedicaba plenamente.

¿Y optará a la reelección en las próximas elecciones?

[Se ríe]. Aún es pronto para hablar de ello.

¿Tiene fuerzas y ganas para seguir en política?

Sí, yo creo que sí, claro que sí.

¿Le satisface que en los últimos años se bata el récord de llegada de pasajeros a la isla?

Me satisfaría mucho que se batiera el récord en temporada baja y media. Este año, en los tres meses y medio de temporada alta, había aumentado un 6%, creo, mientras que desde octubre hasta abril, lo hizo un 23%. Está mejorando la temporada baja. Creo que los 7,9 millones, más o menos, de pasajeros al año que recibe Ibiza son suficientes, incluso podría bajar algo. Habría que controlar mejor el alquiler y la oferta que tenemos.

¿Se ha superado el límite?

En verano creo que sí. De todos modos, de los 7,9 millones de pasajeros registrados, muchos de ellos quizá ni pernoctan en la isla. Además, para los hoteleros es muy bueno, por ejemplo, que en los meses de mayo y octubre haya una ocupación mínima de un 70%, cuando antes se consideraba temporada baja. Tendríamos que ser más fuertes en marzo y abril.

¿Ibiza no tiene remedio ante los problemas de masificación que se repiten cada verano?

A ver, en Ibiza la masificación ha existido toda la vida. Cuando había sólo un mercadillo, ya se decía que estaba masificado?

Por vivir del turismo, ¿entiende que los residentes tienen que convivir tres meses al año con molestias como el ruido?

No, creo que no. Tenemos que actuar sobre el ruido. Antes del turismo no había nada, la gente emigraba. Si logramos ampliar la temporada, podremos buscar un tipo de cliente más sostenible o que por lo menos no afecte tanto [a los residentes] a nivel de ruido.

¿Cree que la nueva ley turística servirá para atajar la oferta ilegal de viviendas vacacionales?

De momento, sí. Desde que se ha aprobado la ley, se ha retirado parte de la oferta ilegal. Pero aún hay algunas plataformas contra cuya oferta tenemos que actuar.

Con la dimensión de la oferta ilegal, ¿considera suficiente que este verano se hayan abierto sólo 11 expedientes de infracción?

Cuando se aprobó la ley prácticamente se dejaron de ofertar muchos pisos [de forma ilegal]. Hay que revisar cada caso, es complicado y laborioso. Puede ofertarse un alquiler de tres o cuatro meses a través de una web.

¿Cree acertado políticamente que en el Consell haya una conselleria de Vivienda cuando la institución no tiene competencias y se pueden crear falsas expectativas a los ciudadanos?

Lo pidió Viviana de Sans [vicepresidenta primera]. Hemos hecho cosas en vivienda. Ahora queremos construir 120 pisos en los terrenos situados tras la Comisaría. Pensamos que este año podemos poner la primera piedra. El Ayuntamiento de Ibiza también proyecta otras 85 viviendas. Vamos por buen camino. Estamos buscando más terrenos para cederlos al Ibavi, que es el que debe construir las viviendas.

¿Se van a invertir los siete millones de euros del remanente del presupuesto en la compra de viviendas, tal como se anunció a mediados del año pasado?

De momento, se lleva adelante este otro plan [el de la promoción de viviendas detrás de la Comisaría] que supondrá un coste de unos seis o siete millones de euros. El Consell financiará la mitad del proyecto con el Ibavi.

¿Entonces, los siete millones para la compra de viviendas se destinarán a esta promoción?

Bueno, en el caso de que no se pueda formalizar la compra. Los siete millones están ahí y si hay ayuntamientos que lo solicitan podrán emplearse para la adquisición de viviendas. Si no, se invertirá en la promoción de la Comisaría.

¿Y las dos cosas?

Nosotros tenemos que comprar a un precio tasado y, si una tasación marca que el valor de una vivienda es de 200.000 euros, no podemos pagar los 300.000 euros que quizá demanda un propietario.

¿Por qué no invierte esta cuantía el Govern balear, ante el grave problema de vivienda que sufre la isla, y el Consell destina los siete millones a otras necesidades que competen a la institución?

El Govern también tiene falta de dinero. Ante una inversión de 12 millones, el Govern precisa de un mayor periodo de planificación, y pide un año más para hacerlo. Si queremos avanzar la ejecución del proyecto y que se empiece este año, tenemos que poner el dinero.

El Consell económicamente va bien, ¿por qué el balance de inversiones, a un año y medio del final del mandato, es tan pobre? ¿Hay falta de gestión política?

No, no es falta de gestión política. Hay pendientes muchas obras que llevan un retraso. El desdoblamiento del tramo de Ca na Negreta se empezará, creo, este mes, pero hasta que no se coloque la primera piedra? es un poco complicado. Ahora presentaremos en Madrid [en Fitur] el proyecto de la escuela de hostelería, que se iniciará este año. Suponen una importante inversión de fondos del Consell.

¿El balance de esta legislatura en carreteras va a ser sólo el inicio del desdoblamiento del tramo de Ca na Negreta y las tortuosas obras de la travesía de Jesús?

No. La semana pasada se aprobó el asfaltado de la carretera de sa Cala de Sant Vicent, que ahora se empezará a ejecutar, y hay muchas otras actuaciones que ya se han hecho y otras en cartera.

¿Pero de mejora de trazado?

Se está evaluando la posibilidad de traspasar al Ayuntamiento de Ibiza la titularidad del primer cinturón de ronda.

¿Pero se iniciarán en este mandato las obras previstas?

Estamos trabajando en ello. Creo que en este mandato se llevará a cabo la transferencia.

¿Y quién ejecutará la obra?

Se está evaluando si lo hace el Consell o el Ayuntamiento, aunque lo financiará el Consell.

¿Considera justo que Menorca haya recibido más fondos del impuesto turístico que Ibiza?

No lo considero justo, pero no hay que tener como referencia sólo un año. El año pasado Ibiza recibió 900.000 euros más. Este les ha tocado a ellos. Espero que en 2018 recibamos más.

Con el peso turístico de la isla en el conjunto del archipiélago, ¿no debería recibir siempre Ibiza más fondos que Menorca?

Bueno, creo que sí. Ibiza recibe 7,9 millones de pasajeros y Menorca, 3,6 millones más o menos. Es más del doble. Cuando decíamos que Ibiza ha de recibir un máximo del 16% del impuesto turístico, tendríamos que haber ido un punto más arriba.

¿Y qué le parece que en Menorca los hoteleros que abran sus establecimientos cinco meses se beneficien de una rebaja del impuesto del 20% y en Ibiza sean necesarios siete meses?

Los turistas pagan el mismo impuesto en todas las islas. En Ibiza los hoteles abren ya seis meses, algo que no sucede en Menorca. No es igual la situación. El incentivo se ha puesto para que en Ibiza los hoteles se animen a abrir más allá de los seis meses habituales, mientras que en Menorca se intenta que abran más de cuatro meses.

¿Se ha discriminado a Sant Joan al no incorporar el proyecto de la depuradora de Portinatx en el reparto del impuesto turístico?

No, no. A ver, hace más de un año le dijimos al alcalde de Sant Joan que presentara el proyecto a través del Consell, con lo que hubiera llegado al Govern como prioritario. No lo hizo así, sino a través de la Federación de Entidades Locales de Balears (Felib). Tengo prevista una reunión con el alcalde para tratar esta cuestión. Nosotros queremos que se haga esta depuradora. Hay muchas maneras de financiarla, y estoy seguro de que llegaremos a un acuerdo. Creo que fue un error del Ayuntamiento presentarlo por la Felib. Quizá lo que quería era que no se financiara a través del impuesto turístico. Buscaremos otra manera.

¿No le parece un brindis al sol su intención de elevar a Madrid una propuesta sobre la reforma de la Constitución, al objeto de que reconozca la discriminación que sufren los isleños en cuestiones como el transporte?

No. En el año 1978, cuando se aprobó la Constitución, ¿cuántos trenes de alta velocidad había en España? Quiero que el hecho insular se tenga en cuenta y se blinde. A las reuniones de la federación española de municipios todo el mundo llega en AVE. Aquí, a Ibiza, nadie puede llegar en AVE.

¿Qué le hace pensar que la Constitución puede corregir los agravios comparativos que sufren los residentes en Ibiza, que, para Madrid, no deja de ser una isla de ricos?

Pueden pensar que Ibiza es una isla de ricos, pero si se revisan las cifras pueden ver a dónde va el dinero. Cuando desde fuera se dice que aquí se pagan 400 euros por una cama, no se tiene en cuenta el coste que supone que un residente estudie en Barcelona.

¿Qué le parece que el Govern tenga que pagar más de 80 millones en indemnizaciones por la protección de zonas como Punta Pedrera o Roca Llisa?

Es mucho dinero. A ver cómo se resuelven los recursos judiciales. Cuando se aprobó esta ley en 2008 se pensaba, seguramente, que se ganarían los litigios. El Govern tendrá que pagarlo.

¿Considera justificado el pago de estas cantidades?

Creo que no. Pienso que se reducirá [con los recursos].

Usted anunció que iba a haber una consulta sobre el nuevo PTI, pero la consellera de Territorio ya ha dicho que es inviable.

Se dijo que antes de la aprobación del PTI, se explicaría a la gente para que votase.

¿Se mantiene la idea pues de convocar una consulta?

Está ahí, pero aún no se ha aprobado la ley de consultas de Balears. Supongo que se hará.

¿Y si la gente votase en contra de la revisión del PTI?

Habría que ver cómo lo afrontamos.

¿El consenso con el PP es imposible?

Por lo que hemos visto en el pasado? Nos hemos reunido muchas veces y no ha acabado bien. Hay que tener una visión global y que no se impongan las tácticas de partido. Si ahora citásemos al PP o cualquier otro partido, incluso de izquierdas, para tomar decisiones sobre el futuro de Ibiza, seguramente pesaría más la parte electoral de los comicios de 2019. Es complicado, pero algún día nos tendremos que sentar para pensar qué futuro queremos para la isla porque no podemos seguir así.

¿Hay una solución al problema casi endémico de la ITV?

Ahora se están buscando soluciones, como instalar una ITV móvil. No queremos privatizar el servicio, pero tampoco que la gente tarde seis meses en pasar la revisión del vehículo. Igual se tiene que ampliar también la ITV.

¿Considera una buena decisión la creación de ocho nuevas jefaturas en el Consell y que, en cambio, para cubrir algunos puestos, se prescinda de uno de los tres celadores de Territorio?

No se crean plazas nuevas, sino que personal de la institución asume una mayor responsabilidad.

Pero suponen un incremento de salario.

Tenemos que hacer ingeniería jurídica para cuadrar las plazas. En el Consell se necesitan 150 funcionarios más para atender todos los servicios que se prestan.

¿Considera justificados los recursos que se destinan a la promoción de la moda Adlib?

Sí, creo que se está haciendo un buen trabajo. Se acude a ferias a las que antes no se iba. Creo que está suficientemente justificado.

¿Se siente cómodo a la hora de defender el decreto sobre el conocimiento del catalán por parte de los profesionales sanitarios?

Sí. A veces la gente habla sin conocer el decreto. La prioridad es la atención correcta de los pacientes, sea en el idioma que sea. Pienso que es bastante difícil que cualquier persona que lleve seis meses trabajando en la isla no pueda superar un examen sobre un conocimiento mínimo del catalán.