Un motorista español y de 37 años (Juan De Dios P.C.) falleció ayer por la mañana en una colisión múltiple en la carretera de Sant Josep en la que se vieron implicados otro vehículo y un autobús cuyos conductores dieron positivo por drogas (uno por cocaína y otro por THC).
El conductor del bus de línea regular, en el que viajaban 25 personas, fue detenido por la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, pero fue puesto en libertad el mismo día y se le ha denunciado por un delito contra la Seguridad Vial, pero no por la muerte del motorista. Los agentes del destacamento de Tráfico investigan las causas del accidente mortal. Los agentes también inmovilizaron el vehículo para proseguir con la investigación. Por otro lado, la empresa de transportes ha abierto una investigación interna por este suceso, según informó un portavoz del Consell a este diario.
El suceso ocurrió ayer sobre las 6.20 horas de la mañana. El servicio del 061 recibió un aviso de una colisión en el kilómetro 4,7 de la EI-700, la carretera que une Eivissa con Sant Josep. Hasta allí se desplazó una ambulancia UVI Móvil. Los sanitarios atendieron a la víctima pero, dada la gravedad de su estado, no pudieron hacer nada para salvar su vida. Los conductores del bus y el coche, por su parte, resultaron ilesos.
Hasta el kilómetro 4,7 también se desplazó una patrulla de Atestados de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil. Un portavoz de la Oficina Periférica de Comunicación del Instituto Armado de Balears informó de que el motorista, que circulaba en una moto de 125 cc, se estampó contra la parte trasera de un automóvil de la marca Honda. El conductor de este vehículo frenó de repente porque delante de él se había parado un autobús de la línea L8. No obstante, al motorista no le dio tiempo a detener su vehículo, al parecer iba distraído, y se estampó contra la parte trasera. Como consecuencia, el vehículo colisionó también contra el autobús.
Uno de los carriles de la carretera EI-700 permaneció cortado al tráfico durante más de una hora.
El balance
Del total de los 14 fallecidos en las Pitiüses en lo que va de año (13 en Eivissa y uno en Formentera), la mitad eran motoristas. El primero que perdió la vida en las carreteras de Ibiza fue W.M.A., de 45 años, el pasado 23 de junio. Al parecer, el conductor perdió el control de su motocicleta y cayó por un torrente cuando cuando circulaba por la carretera que une Sant Llorenç con Santa Gertrudis. Dos semanas después, el 7 de julio, falleció otro conductor de moto de 40 años (A.C.) en la carretera que une Santa Eulària con Cala Llonga.
Sin embargo, el mes más fatídico fue agosto, cuando fallecieron cuatro motoristas (tres en Ibiza y uno en Formentera).
El 2 de agosto un motorista de nacionalidad española y de 40 años falleció tras perder el control de su vehículo en una curva, caer al suelo y ser arrollado por un coche en el Camí des Molins, en Formentera.
No habían transcurrido ni 24 horas cuando en el kilómetro 3 de la carretera de Santa Eulària un hombre de 34 años, que iba en moto en dirección a Vila, colisionó contra un turismo Volkswagen tras intentar esquivar otro vehículo que invadió su carril y huyó tras provocar el accidente. El 4 de agosto murió Nieto después de pasar ocho días en coma inducido en la Policlínica tras sufrir el 27 de julio un accidente cuando iba en quad.
Un motorista de 26 años fue la última víctima mortal de agosto tras colisionar contra una furgoneta en la misma vía en la que falleció ayer un hombre de 37 años.
