Shane Looker, británico de 47 años sobre quien pesaba una orden de búsqueda y arresto internacional, ha pasado su primera noche en prisión después de su detención ayer como presunto autor de la horrible muerte de una joven tailandesa, que apareció descuartizada en una maleta en noviembre de 2014. Desde entonces, Looker se hallaba en paradero desconocido, aunque hace tiempo que la Guardia Civil tenía constancia de que residía en la isla, donde al parecer es socio de un hotel.

Fuentes del instituto armado confirmaron que, a pesar de que hacía tiempo que se sabía que Looker estaba en Ibiza, no se había logrado averiguar su dirección. En cambio, sí conocía la matrícula del coche de alta gama que conducía, por lo que se optó por tenderle una trampa, aprovechando la cita que pidió para una revisión en el taller.

Este es el vídeo en el que se ve a Looker y la joven saliendo de un bar

A la salida del concesionario, situado en el polígono del aeropuerto, agentes de la Guardia Civil procedieron a su detención y su inmediata puesta a disposición del juez en Ibiza. El Juzgado Central de Instrucción número 3 de la Audiencia Nacional, a cargo del caso, ordenó el ingreso en prisión provisional a la espera de su extradición, informó el TSJB.

Dos años y medio de búsqueda

Dos años y medio de búsquedaCon su arresto finaliza una caza del hombre que ha durado más de dos años y medio, desde que se identificara a Looker como la última persona a quien se vio junto a Laxami Pook Manochat antes de su desaparición, el 2 de noviembre de 2014. Manochat trabajaba como bailarina en un bar de la plaza Nana, donde cientos de turistas se dan cita cada noche en busca de alcohol y sexo.

Una semana después, su cuerpo apareció troceado en una maleta junto al río Mae Klong, a más de 100 kilómetros de la capital, Bangkok. No fue hasta un mes después cuando un blog tailandés, Stickboy, logró identificar al acompañante como Looker, gracias a las imágenes de las cámaras de vigilancia de la plaza, distribuidas por la Policía. En ellas, aparecía la víctima acompañada por un individuo de constitución fuerte, pelo rapado y aspecto europeo.

Prosiguiendo con las pesquisas, la Policía tailandesa dio con el lugar donde se ocultó Looker, en el que hallaron la ropa que llevaba la noche de la desaparición de la gogó, y obtuvo muestras de ADN del británico coincidentes «con los rastros hallados en las uñas» de la víctima. El británico pasó a ser considerado como el principal sospechoso de los hechos y se solicitó a Interpol la colaboración internacional para dar con él.

Looker llegó a Tailandia el 31 de octubre de 2014. Las investigaciones concluyeron que el británico salió del país cruzando la frontera con Malasia en tren el 24 de noviembre (tres semanas después de hallarse el cadáver) y que de allí había tomado rumbo a Ibiza, donde, según publicó Stickboy, pasaba los meses de verano y donde presuntamente contaba «con una participación en un hotel».

Looker y Manochat, en unas imágenes publicadas por Mail Online.