La escoleta de Can Nebot constituye uno de los ejemplos más elocuentes de ineficacia institucional y lentitud burocrática. El centro fue ideado y proyectado en el año 2000 para dar respuesta a la necesidad de escolarización de niños de hasta tres años de edad en esta zona de la parroquia de Sant Jordi. No fue hasta 2004 cuando el pleno municipal de Sant Josep acordó ceder al Consell el terreno correspondiente. En 2006 la consellera de Educación del Consell anunciaba que las obras se iniciarían ese mismo verano. Sin embargo, en 2008, debido a numerosas irregularidades en la construcción, el Consell se vio obligado a rescindir el contrato con la empresa adjudicataria. Posteriormente, se asignó el trabajo a otra compañía, que terminó la obra en el año 2010. Pero otros problemas surgidos posteriormente mantienen la ´escoleta´ terminada pero sin poder abrir. El año pasado, el Consell afirmaba que no sabía cuándo podrá funcionar, puesto que la ley impide ahora contratar el personal necesario para que abra.