El Parque Natural de ses Salines de Ibiza y Formentera ha lanzado otra campaña informativa para reiterar la prohibición de los baños de barro en la laguna de la isla de s'Espalmador, que se sigue promocionando entre los turistas, a pesar de ser una actividad "expresamente prohibida".

La campaña, según ha informado el Govern balear en un comunicado, se destina a turoperadores, hoteles, apartamentos, alquileres de vehículos, servicios náuticos y otras empresas relacionadas con el sector turístico.

Además, se han instalado en los principales accesos de s'Espalmador, cuatro señales de grandes dimensiones informando sobre la prohibición de esta actividad.

El Govern señala que nunca se ha descrito que los baños de barro, de moda desde hace algunos años entre los visitantes, supongan ningún beneficio para la piel y en cambio podrían comportar algún tipo de problema o infección debido a que son aguas estancadas sin salida o comunicación con el mar.

Sobre todo, recuerda que es una actividad prohibida por la normativa del parque porque supone la modificación de la morfología del litoral de la laguna, ya que se hacen pequeñas balsas y agujeros para sentarse y recoger el barro.

Además, supone graves molestias para la fauna de la zona y modifica el sustrato donde muchas especies se alimentan, sobre todo aves limícolas.

A pesar de que con anterioridad se han hecho intervenciones para evitar el acceso de los turistas, mediante delimitaciones con palos y cuerdas en la laguna, y señales de prohibido pasar, la actividad se continúa realizando y publicitando.

Por ello, el Govern solicita la máxima colaboración de administraciones y empresas turísticas para evitar el impacto de una de las zonas húmedas más importantes del Parque.

Es una zona de especial relevancia, tanto por su singularidad, porque se trata de una laguna en un islote pequeño, como por su potencial para las aves acuáticas, que la utilizan como lugar de descanso y alimentación.