El diputado de Podemos en el Parlament balear Salva Aguilera calificó ayer de «alucinante» que la delegación de Educación en Ibiza optara a principio de curso por no escolarizar a 16 niños de tres y cuatro años para evitar masificar las aulas. Aguilera, docente de profesión, reconoció que el elevado número de alumnos en las aulas debido a la falta de centros en las Pitiusas es «un problema» que debe solucionarse «cuanto antes». Sin embargo, recalcó que no escolarizar a estos niños para que no haya aulas de Infantil con más de 25 pequeños es «menospreciar» sus derechos y necesidades.
Aguilera señaló que es preferible «hacer una excepción» e incrementar en uno o dos alumnos la recomendación de un máximo de 25 niños en Infantil a que haya niños en sus casas. De hecho, destacó que la decisión de la delegación territorial debe abrir el debate sobre la importancia de escolarizar a todos los niños, independientemente de que sea en etapas en las que la educación no es obligatoria.
El político de Podemos denunció que la situación de estos niños que no van a clase supone una «discriminación» respecto a los que sí cuentan con una plaza escolar, opinión con la que cree que familias y docentes estarán de acuerdo.
El diputado de Podemos señaló que el caso de las gemelas que viven en Port des Torrent y a las que han asignado plaza en Sant Jordi pone de manifiesto, además, «los problemas de movilidad» que padece la isla y a los que se enfrentan «muchas familias». En este sentido, lamentó que ni los menores de seis años ni los de más de 16 años (los que cursan Bachillerato o algunos ciclos formativos) tengan derecho a transporte escolar. «Sólo pueden usarlo si sobran plazas», criticó.
Aguilera denunció que «hace muchos años» que faltan plazas educativas en algunas zonas de los municipios de Santa Eulària y Sant Josep y exigió al Govern que solvente no sólo la carencia de infraestructuras sino también el estado de algunas de ellas, que necesitan reformas. «El Govern tiene que hacer un esfuerzo», insistió el diputado de Ibiza, que recordó que las Pitiusas han tenido durante la última década un incremento constante de alumnos. «Muy por encima de Mallorca o Menorca y esto no se ha correspondido con un aumento de las infraestructuras educativas, que no están preparadas para acoger como toca a todos los alumnos», concluyó.
