Tras los éxitos cosechados con sus dos últimos montajes, ´El sí de las niñas´ y ´Por amor a Lorca´, Antonio Cantos regresa hoy y mañana a Can Ventosa (21.30 horas) con un doble reto. El primero, estar a la altura de uno de los grandes clásicos del teatro, ´Tío Vania´ de Anton Chejov, y el segundo su doble rol de director y actor después de ocho años sin pisar las tablas ibicencas como intérprete.

«De nuevo un clásico muy potente -señalaba ayer Cantos antes de dirigir el último ensayo-. Lo hemos elegido porque nos gustó mucho el tema: la frustración, cómo el paso del tiempo mata las esperanzas, que creo que es muy actual ahora que la gente está baja de moral. De todas formas lo que Chejov nos dice es que no tenemos que quedarnos con los brazos cruzados, tenemos que hacer lo que siempre hemos deseado».

Por ello, el director busca esa reacción en el público: «Espero que reaccionen y que salgan de la obra transformando la frustración en algo positivo y diciendo ´lo voy a hacer´». También confía en que sirva para dar a conocer un poco mejor a los clásicos en la isla: «Con AMC Producciones trabajamos para traer teatro de calidad a Ibiza y qué mejor que un clásico, que además es bastante desconocido entre la gente joven. Tenemos que lograr que se reconcilien con el teatro, que al fin y al cabo es la tele en 3D. Cuando me hablan de 3D yo digo: ´eso estaba inventado hace 2.500 años. Se llama teatro´».

La atención en el texto

Cantos ha querido hacer una escenografía lo más escueta posible: «Es una escenografía en esqueleto para concentrar la atención en el texto y en los actores, aunque hemos buscado darle antigüedad a través de un vestuario muy cuidado. La construcción de la obra es perfecta, tiene una estructura muy sólida y hemos querido basarnos en esos textos, que es un honor decir para cualquier actor», destaca.

Precisamente asegura que lo más gratificante ha sido el trabajo con los intérpretes, la mayor parte habituales en sus montajes. Además de Cantos en el papel de Vania, estarán Ariadna Leo, Belén Liñán, Àngels Martínez, Joan Prats, Juan Torres, Borja Tous y Nebu Uben. «Empezamos el trabajo de mesa en julio -explica Cantos-, y hemos disfrutado mucho. Chejov, que fue el impulsor del realismo, que alejó al teatro de la exageración de la época, es un dramaturgo muy rico en matices. En el trabajo con los actores hemos buscado la emoción pura, el sentimiento auténtico, huyendo de lo artificioso, y ha sido enriquecedor, como actores, pero también como personas».

Tras el estreno en Ibiza, en el que se hará una grabación en vídeo de la obra, esperan poder llevarla a otras ciudades, a través de la plataforma Sea Arts, que promociona a las compañías de Balears en el exterior. «Es un momento muy difícil -admite el director-, pero vamos a moverla todo lo que podamos y también iremos a festivales para rentabilizar todo el trabajo que hemos hecho».