Alrededor de 150 personas se han manifestado este martes ante el Parlament y han protagonizado una "siurellada" contra la reforma de la Ley de la Función Pública que elimina el catalán como requisito en la administración pública y que se aprobará este martes con los votos del PP y no de la oposición.

El presidente de la Obra Cultural Balear (OCB), Jaume Mateu, ha asegurado a Efe que esta reforma excluye el catalán del conocimiento de los funcionarios, genera un perjuicio a la lengua propia porque será eliminada de la administración pública y permitirá que los topónimos característicos de las islas se castellanicen.

Para Mateu, estos elementos demuestran que se ha dado marcha atrás hasta "tiempos predemocráticos" y, por eso, ha instado al PP a que no modifique la Ley de la Función Pública, al tiempo que ha subrayado que es el único partido que apoya esta reforma.

Los manifestantes han cantado "L'estaca", del cantautor catalán Lluis Llach, han coreado el lema de "A Mallorca, en català" y han silbado a los diputados que llegaban al pleno ante un dispositivo policial, incluidos antidisturbios, que no ha tenido que intervenir y que han impedido el paso a las puertas del Parlament.

La convocatoria ha sido aplazada hasta las 13.00 horas, cuando está previsto que finalice el pleno y cuando volverán a realizar más pitadas a la salida de los diputados de la Cámara legislativa.