­Los avezados ciclistas que se atrevieron a participar en el I Trofeu BTT Rafal Trobat fueron los primeros en disfrutar ayer de los encantos de esta vénda, aunque poco después fueron centenares las personas que acudieron allí para participar de la fiesta payesa con la que la asociación de vecinos invita al resto de la isla a descubrir este paraje, situado en la zona más montañosa de Sant Jordi. Los asistentes pudieron recorrer a pie este valle, un auténtico pulmón verde, en una excursión. Los menos animosos también tenían la oportunidad de descubrirlo en carro, como se proponía hacer la alcaldesa de Sant Josep, Neus Marí. «Voy a probar un vehículo ecológico», le comentó entre risas a Rafel Tur, tesorero de la asociación de vecinos. «Cero emisiones», respondió él con humor.

Además de disfrutar del paisaje se podía satisfacer el estómago. Por 10 euros se podía conseguir un plato de arròs de matances y una bebida. No era esa la única forma de financiarse de la asociación, que había preparado camisetas y bolsas y también ofrecía buñuelos o cervezas en diferentes puestos. Las 45 familias que residen en esta vénda gestionan un coto de caza con podencos ibicencos.

Lo que consiguen con esta explotación lo reinvierten en su valle: han recuperado elementos etnológicos, tienen comederos y bebederos para animales, aran y siembran las tierras? «La asociación gestiona los cultivos a los vecinos con tierras gratuitamente», explica Tur. Esos campos trabajados son de inestimable ayuda a la hora de atajar un incendio. Con los ingresos procedentes del coto reconstruyen paredes de pedra seca, aljibes, fuentes, pozos y otros elementos patrimoniales propios de este entorno rural.

Toda la vida sin teléfono

Esta asociación de vecinos, como todas, nació para intentar subsanar en grupo deficiencias que de forma individual los vecinos no lograban dejar atrás. Es Rafal Trobat es, como dice con orgullo el tesorero, «la Eivissa profunda». Se agruparon para luchar por la conexión a la red municipal de agua y, aunque han conseguido otros logros, esta meta sigue pendiente.

En el valle no hay cobertura telefónica, los vecinos no pueden utilizar sus móviles en casa. Eso no es lo más llamativo. Ayer celebraban su acuerdo con Ib-Red, la empresa que, gracias a una subvención de 25.000 euros del Grupo Leader, va a hacer que Es Rafal Trobat tenga telefonía fija y servicio wifi para acceder a internet. Va a ser todo un salto cualitativo para estas familias que, hasta ahora, cumplían condena de aislamiento por el privilegio de vivir en un paraíso recóndito.

No es este el único proyecto que esta asociación, excepcionalmente activa, tiene en marcha. También han solicitado la ayuda del Grupo Leader para desarrollar su plan de gestión forestal. Este proyecto está pendiente de aprobación y supondrá un complemento a las medidas de prevención de incendios que promueva la administración.

«Esta asociación está abierta a todo el mundo. Queremos poner en marcha proyectos que tengan una repercusión positiva. Buscamos soluciones y somos muy imaginativos», advierte Tur con rotundidad. A veces, al ingenio y la tenacidad solo los frena la burocracia.