Autoridades y cargos políticos del PSOE y del PP coinciden en la necesidad de adoptar, de forma prioritaria, planes de gestión para las zonas boscosas de Ibiza, al objeto de impedir o, al menos, minimizar los efectos de los incendios forestales de grandes dimensiones, como el que ha arrasado los montes de Sant Joan. Tanto el alcalde de este municipio, Antoni Marí, como el de Santa Eulària, Vicent Marí, y la consellera de Interior del Govern en funciones, Pilar Costa, se expresaron ayer por separado en estos términos y consideraron que no es posible dejar las masas forestales sin ningún tipo de actuación que ayude a atajar los incendios que se declaren.
El alcalde de Santa Eulària, en cuyo municipio la superficie afectada ronda las 250 hectáreas de las 1.576 que abarca todo el perímetro, afirmó ayer que, «los bosques de Ibiza se regeneran con rapidez, pero de manera caótica», con los nuevos pinos muy tupidos y tan próximos entre sí «que son lugares intransitables». Esos bosques «son una bomba de relojería», señaló Vicent Marí, quien añadió: «Son masas verdes muy bonitas desde lejos, pero ni siquiera se puede caminar por dentro; es un polvorín».
El alcalde de Santa Eulària opina que «incendios los habrá siempre, pero al menos se trata de que las consecuencias no sean tan dramáticas». Por ello, abogó por una actuación «conjunta de todas las Administraciones», con fondos de otras instituciones.
Limpiar bosques y cortafuegos
Según dijo, la gestión de los bosques para limpiar las masas forestales y crear cortafuegos «costaría menos dinero que el gasto que ha originado ahora la movilización de este operativo». «Se ha gastado ahora en cuatro días lo que costaría la gestión durante 25 años», aseguró.
El alcalde de Sant Joan, Antoni Marí, por su parte, ha venido reiterando en los últimos días su convencimiento de que es necesario actuar sobre las masas forestales con medidas preventivas para mitigar los efectos de los incendios. Sobre la posibilidad de proceder a un plan de reforestación, aseguró: «Tenemos la suerte en Ibiza de que los pinos se regeneran automáticamente y no es necesario sembrar», pero admitió que en casos de erosión severa debería actuarse para evitar que desaparezca la tierra sobre la que ha de crecer la vegetación. «Si se va la tierra no quedaría nada», constató. En este sentido, consideró necesario colocar troncos en el suelo formando taludes para favorecer la retención de la tierra, «como se ha hecho en Benirràs».
Sin embargo, Marí –que en pocas semanas será conseller insular y, probablemente, llevará un área relacionada con la agricultura o el medio ambiente– admitió que desconoce de dónde procederán los fondos para acometer este plan de restauración.
«Como en Benirràs»
El alcalde consideró que la prioridad consiste en eliminar los troncos muertos y limpiar las vaguadas. «Me gustaría que se hiciera lo que se ha hecho en Benirràs, pero hay que pensar que lo de Sant Joan es lo de Benirràs, pero multiplicado por tres», afirmó.
Antoni Marí elogió la «buena comunicación» que ha habido entre todos los cuerpos que han integrado el operativo de extinción. El alcalde de Sant Joan fue muy crítico con la gestión del incendio de Benirràs, «pero lo que se ha hecho ahora presenta una diferencia con lo que se hizo en Benirràs como de aquí a Roma», aseguró. Según Marí, entonces no hubo diálogo ni comunicación, mientras que ahora sí se ha producido este entendimiento entre todos los implicados.
La consellera Pilar Costa, por su parte, afirmó ayer que «no solo se deberá hablar de la restauración de Sant Joan, sino que habrá que iniciar un debate más profundo de lo que ha de ser la gestión forestal y la limpieza de los bosques». De este modo, la responsable autonómica de Interior en funciones se sumaba a la opinión expresada por los dos alcaldes de acometer un programa de actuaciones de limpieza de los bosques.
En otro orden de cosas, los ayuntamientos de Sant Joan y Santa Eulària iniciaron ayer los trabajos para estudiar las posibles fuentes de ayudas económicas tanto para acometer esos planes de restauración como para los propietarios afectados por el incendio. Tanto Vicent Marí como Antoni Marí aseguraron que ya tienen documentación previa para iniciar la búsqueda de esas líneas de ayuda ante las administraciones nacionales y comunitarias.
