Eivissa | Ángeles M. Obispo

El Obispado de Eivissa expresó ayer, a través de una carta dirigida a la directora del Museo de Arte Contemporáneo, Elena Ruiz, su «más enérgica y rotunda condena, la reprobación más firme y el rechazo de plano, sin ningún tipo de paliativo» hacia el contendido de algunas de las imágenes expuestas en la muestra `Vamos a Ibiza´ que acoge desde el pasado día 7 la iglesia de L´Hospitalet. En uno de los tres collages del artista Ivo Hendriks aparece la imagen del Papa Juan Pablo II manteniendo relaciones sexuales con otro hombre y varios iconos de la escenografía católica entremezclados con explícitas escenas de sexo. La diócesis, exige en la misiva la retirada «inmediata y urgente» de las imágenes, porque dicen, «ofrenden los sentimientos de los católicos», y amenaza con emprender acciones judiciales si no son atendidas sus reclamaciones.

El Obispado recuerda en un comunicado que la iglesia de L´Hospitalet fue cedida por la diócesis en 1997 a la Fundación Diocesana Isidor Macabich, la cual la cedió a su vez al Patronato Municipal del Museo de Arte Contemporáneo del Ayuntamiento de Eivissa (MACE) para realizar allí las actividades establecidas en sus estatutos, un convenio que ahora se incumple con esta muestra. El escrito asegura que en dicho acuerdo se establece que tanto la Fundación como el Patronato deben pactar anualmente «de mutuo acuerdo», el calendario y el contenido de las actividades realizadas en L´Hospitalet. Sin embargo, continúa el comunicado, ahora el Obispado se ha visto sorprendido por el MACE. Asimismo asegura no entender cómo «el abuso de la libertad de arte y de expresión pueda ser utilizado para herir los sentimientos de los católicos» y, además, afirma, en un edificio que es propiedad de la iglesia y donde durante muchos años se ha celebrado el culto católico.

«No censuramos»

La exposición `Vamos a Ibiza´ fue inaugurada el pasado día 7 de septiembre y acoge una muestra del trabajo de 15 artistas holandeses relacionados de diversas formas con la isla a lo largo de los últimos 50 años. Es fruto de la colaboración entre el MACE, el Consell Insular, el Groninger Museum, la asociación Arti e Amicitiae de Ansterdam, el Fondo Neerlandés de Producción y Traducción Literaria y varias organizaciones culturales de Eivissa. En ella se pueden admirar pinturas, manuscritos, películas, figuras artísticas, proyecciones de vídeo, fotografías, dibujos, arte digital, prosa y poesía. La muestra fue exhibida recientemente en Holanda y según responsables del Ayuntamiento de Eivissa tuvo una gran acogida por parte del público. La exposición permanecerá abierta hasta final de mes.

Ante la polémica suscitada por la muestra, la concejal de Cultura en el Ayuntamiento de Eivissa y vicepresidenta del Patronato del Museo de Arte Contemporáneo, Sandra Mayans, dijo en respuesta a la petición del Obispado que el equipo de gobierno de Vila «nunca ha aplicado ni aplicará jamás ningún tipo de censura sobre la expresión artística». Mayans no quiso valorar si las obras expuestas eran pornográficas o no porque, dijo, «corresponde a los críticos de arte» y porque el Ayuntamiento de Eivissa «respeta la libertad de expresión de todos los artistas y la opinión de aquellas personas que expresen su disconformidad con la muestra». La responsable de Cultura en el Ayuntamiento aseguró que ni los miembros del Patronato ni los técnicos que lo conforman encontraron ningún motivo para no exponer las obras. Sandra Mayans respondió que como madre se muestra más preocupada por la facilidad con la que los niños pueden acceder a ciertos contenidos pornográficos en Internet que por la posibilidad de que su hija vea la muestra. «Prefiero que vea esta exposición con una escena en un cuadro que es lo más natural del mundo a otras cosas más perjudiciales», aseveró.

Por otra parte, el Observatorio Antidifamación Religiosa y el Centro Jurídico Tomás Moro condenaron ayer la exhibición de la muestra.