Diario de Ibiza

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David Ventura

‘Boomers’ al mando de Fiestas

Antes, en las fiestas patronales, había la noche para la gente mayor -con la orquestina que interpretaba pasodobles, canción ligera y lo que hiciera falta- y la noche en que la concejalía pensaba en los jóvenes, se rascaba el bolsillo y traía a un grupo que triunfaba en la Península. Esto ha cambiado. Ahora, una generación de cuarentones se ha hecho fuerte en concejalías y comisiones de fiestas y, empujados por la fanática convicción de que la mejor música es la que se hizo durante su juventud -ya ves qué casualidad-, han decidido evangelizarnos y perpetuar sus gustos personales. Hago un repaso a los conciertos de las últimas fiestas y es para llorar: en las de Sant Antoni vinieron OBK y un grupo de tributo a El Último de la Fila. En Santa Gertrudis, los Seguridad Social. En Sant Carles, la macrobanda Ochentísimos con viejas glorias de esa década. En las Festas de la Terra de Vila, esas ‘jóvenes promesas’ de Los Rebeldes. Carteles que huelen a caspa ochentera. Nadie, absolutamente nadie, programa conciertos para los menores de 35, y lo único digno son las actuaciones de los grupos locales. Supongo que a nuestros concejales les repugna el reggaeton y que lo consideran el ritmo del demonio, a todos ellos les tengo que dar una mala noticia: pese a sus prejucios y a su moral de sacristía, los chavales seguirán perreando, le guste a la autoridad gubernativa o no.

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