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Martorell

La tomadura de pelo de las llamadas 'pateras'

El pasado sábado día 10 salí a navegar invitado en el barco de una amiga. Buscamos un sitio en el que no hubiese ni viento ni olas y acabamos echando el ancla en s’Estanyol, cerca del barco de unos amigos con los que me estuve bañando. Al acercarnos a la costa, nadando, vimos una pequeña barca, con un motor fueraborda, varada sobre las rocas. Y nos acercamos.

LA TOMADURA DE PELO DE LAS LLAMADAS ‘PATERAS’

En esa barca, abandonada, había doce chalecos salvavidas, una caja con comida en mal estado, y unos bidones con gasolina.

LA TOMADURA DE PELO DE LAS LLAMADAS ‘PATERAS’

Y, en tierra, vimos mucha ropa y basura esparcidas por el suelo que, obviamente, habían sido tiradas por los inmigrantes que, tras desembarcar por la noche, habían salido corriendo.

Esa pequeña barca estaba en perfecto estado y con un motor fueraborda nuevo y de una buena marca.

Nos quieren hacer creer que los inmigrantes llegan a nuestras costas, provenientes de África, en una pequeña barca como la que encontramos, embarrancada, en las rocas de S’Estanyol. Las mafias suben a los inmigrantes en grandes embarcaciones, los acercan a las costas y luego los hacen saltar a pateras, o a pequeñas barcas, con las que sería imposible llegar desde África hasta nuestras costas.

Los mafiosos suelen cobrar unos dos mil euros por persona. Y los inmigrantes no se atreven a denunciarles por miedo a que dañen a sus familiares en sus países. Me resulta del todo incomprensible que no se acabe con esas horribles mafias, que se enriquecen sin escrúpulos a costa de gente desesperada. Y no todo son mafias. Hay también listos que delinquen por su cuenta. Y el Gobierno marroquí no colabora.

Mis amigos, a empujones, sacaron la barca de las rocas y la sujetaron a su yate para llevarla al puerto y entregarla a las autoridades. Evitando, así, que toda la gasolina y las porquerías que había en esa barca, acabaran en el mar. Y para evitar, también, que un listo se quedase con la barca, o con ese motor Yamaha, en perfecto estado. Finalmente llegó la Guardia Civil y se llevaron la barca.

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