En esta época caracterizada por la saturación y el bombardeo de información y todo tipo de mensajes, paradójicamente hay un rechazo generalizado a la crítica y a las opiniones discrepantes. Las redes sociales e internet facilitan un flujo instantáneo e inagotable de información, pero al contrario de lo que cabría esperar, esta abundancia de mensajes no nos ha hecho más tolerantes, más bien al revés: los algoritmos de las redes sociales nos muestran las opiniones y planteamientos de quienes están en nuestra onda ideológica, lo que crea burbujas de opinión y visiones parciales del mundo que promueven la intransigencia hacia quienes piensan de forma diferente.

Por el contrario, los medios de comunicación independientes y plurales se erigen como una casa común en la que caben todas las voces, y permiten el debate, la confrontación de ideas y fomentan la reflexión y el diálogo desde posturas distintas. Este pluralismo es una de las señas de identidad de Diario de Ibiza desde hace treinta años, desde que en 1991 Prensa Ibérica compró la cabecera, la modernizó y la convirtió en la referencia informativa indiscutible de Ibiza y Formentera. El presidente de Prensa Ibérica, Javier Moll, recordó el jueves en el acto de entrega de los Premis Diario de Ibiza los valores que sustentan este grupo editorial, que suma 25 diarios en todo el país: la pluralidad, la defensa de la Constitución, de la España de las autonomías, el apego a la comunidad más cercana, la libertad de expresión, el compromiso con los lectores, la tolerancia, el respeto a quienes opinan de forma diferente, la igualdad. Esa diversidad de voces es lo que hace grande a un diario, y lo que debemos defender los profesionales de la información, porque es nuestra obligación. La declaración de principios de Moll coincide con el nacimiento de un nuevo periódico del grupo en Madrid, El Periódico de España, cuya vocación es precisamente dar voz y visibilidad a las regiones, a sus problemas y sensibilidades, sobre la base firme de los 24 diarios regionales que Prensa Ibérica tiene repartidos por todo el país.

Hubo otro momento en la gala de los Premis Diario de Ibiza que puso de manifiesto lo que representa un periódico local para la comunidad en la que está arraigado. El atleta olímpico Marc Tur, en su discurso de agradecimiento por el premio al Personaje del Año, sacó del bolsillo dos recortes de Diario de Ibiza: uno, de la primera vez que salió en las páginas del rotativo local, con sólo 14 años; el otro, una entrevista publicada hace diez años con un titular premonitorio en el que decía que su sueño era participar en unos Juegos Olímpicos. El protagonista del mayor hito del atletismo balear expresó su agradecimiento al periódico y a sus periodistas, que han seguido y apoyado su carrera a lo largo de todos estos años, desde que era adolescente. Esta anécdota ejemplifica el fuerte vínculo emocional que establece un diario local con sus lectores, que a menudo son también los protagonistas de las informaciones, que guardan durante años, como Marc Tur. Es el compromiso del diario con la comunidad a la que sirve y, a la vez, la expresión de la confianza y el apego de los lectores hacia su medio informativo de referencia.

La gala de Diario de Ibiza sirvió, en suma, para poner de manifiesto, una vez más, la defensa del pluralismo, del derecho a la información y de la libertad de expresión, pese a quien pese, y el permanente compromiso de este periódico con Ibiza y Formentera.

DIARIO DE IBIZA