Que los promotores de las casas de madera en Can Germà hayan parado las obras después de perder la financiación por «el revuelo» que ha provocado su construcción sin licencia. La polémica se inició porque las seis familias de médicos que promueven la obra comenzaron la construcción sin esperar a la licencia del Ayuntamiento de Sant Antoni, acogiéndose al llamado silencio administrativo positivo. Ante la pasividad del Ayuntamiento (los promotores solicitaron la licencia a medidados de enero de 2019, cuando aún gobernaban PSOE y Reinicia), empezaron a levantar las casas y el actual Consistorio sigue sin decidir qué hacer con este proyecto.
Que el Vaticano haya obligado al Arzobispado de Valencia a investigar la denuncia de un hombre que asegura que un religioso abusó sexualmente de él cuando tenía 10 años y era monaguillo en Ibiza. Un sacerdote de Valencia viaja esta semana a la isla para interrogar al denunciante, que afirma que no fue la única víctima.
