Andrés Palop dejó de ser anoche entrenador del equipo de Segunda B de la UD Ibiza, 'víctima' de la guillotina en que se ha convertido el puesto de técnico en la entidad que preside Amadeo Salvo. La del valenciano es la segunda destitución que practica el club esta temporada en el puesto de preparador del primer equipo. No en vano, el propio Palop fue el que sustituyó a 'Ñoño' Méndez, caído en combate tras cinco jornadas ligueras. Pero desde que en 2015 Salvo reflotara el club de Vila, el reguero de entrenadores que ha dejado por el camino es largo: Buti, David Porras, Manel Benavente, Toni Amor, Rufete, 'Ñoño' Méndez y ahora Andrés Palop. Una auténtica locura. Una vez más, el club evitó explicar los motivos de la destitución del valenciano y de su cuerpo técnico, y se limitó a agradecer los servicios prestados. La imagen del equipo ayer en El Ejido no fue buena, pero los proyectos que buscan el éxito no cuadran bien con las prisas que desde hace ya mucho tiempo están instaladas en la sede del club de Can Misses. Quedan doce jornadas de Liga y la plantilla (que por cierto también fue renovada ampliamente en el mercado invernal) vivirá un empezar de nuevo. Veremos qué pasa.