La defensa acérrima de la primera teniente de alcalde de Sant Josep, Paquita Ribas, de las actuales condiciones laborales de los asalariados del taxi, a pesar de las jornadas extenuantes y los meses sin libranzas. Decir, como hace Ribas, que «no todo el mundo sirve» es descargar la culpa sobre las víctimas de unos excesos que, como por el contrario señala el concejal de Vila Juan José Hinojo, no son de ahora y todo el mundo conoce. Lo más sorprendente es que, a diferencia de lo que piensan otros regidores de la isla, considere que no hay ningún peligro en esta situación para la seguridad del tráfico.

Que el Comité de Competición haya decidido no sancionar al segundo entrenador del Luchador, José Páez, que amenazó a un árbitro de 15 años en la barca de Formentera después de un partido de Regional. El Comité, al no castigar su actitud, minimiza el problema como lo hace el propio técnico y demuestra el poco interés que hay en el mundo del fútbol por erradicar la violencia.