La cosecha de la algarroba y de la almendra en Ibiza ha caído este año un 80%, una noticia nada halagüeña para el sector primario, en retroceso desde hace años frente al turismo, motor casi único de la economía de la isla. Sin embargo, ayer publicaba Diario de Ibiza otra información que daba un soplo de aire fresco a la agricultura insular: la inauguración de una almazara industrial y comunitaria en Sant Joan. El sector del olivar ofrece brotes amarillos con la incipiente producción de aceite de oliva virgen extra. Si tradicionalmente, los 'trulls' de la isla se usaban para el autoconsumo, ahora empieza a despegar un mercado que, si bien no puede competir en cantidad con las grandes producciones de Jaén, sí lo puede hacer en calidad ofreciendo un exquisito aceite 'made in Ibiza'. En la actualidad existen 15 marcas en la isla y la producción anual ronda los 20.000 litros, tal y como avanzaba a principios de año la agrupación del olivar de Ibiza, que agrupa a 65 productores y suma más de cien hectáreas de olivos. Cada vez hay más demanda del aceite ibicenco, tanto por parte del consumidor individual, como los restaurantes. Gracias a campañas como ´Sabors d´Eivissa´ se han puesto en valor productos locales como éste. Además, asociaciones como Amics de la Terra promueven los productos de kilómetro cero. Pequeños pasos que redundan en nuestro bienestar, y quién sabe si, en un futuro, en la diversificación de nuestra economía.
