Manu se planta en Pasapalabra, dice basta y sorprende a todo el mundo

Pasapalabra vive diariamente muchos momentos de tensión protagonizados por sus concursantes, Manu y Rosa, en su lucha por ganar el millonario bote del concurso.

A diario, ambos se enfrentan a las diferentes pruebas y a El Rosco, paso previo para conseguir el acumulado de 1,6 millones de euros, y en ocasiones los nervios les juegan muy malas pasadas, a pesar de que los dos sean ya 'veternao' en el programa.

Mientras la expectación crece por ver quién se llevará el millonario premio —que ya roza los 1.600.000 euros—, los dos gigantes del concurso, Manu y Rosa, continúan batiendo marcas históricas con su longevidad. Pero no fue un récord lo que marcó esta emisión, sino un momento de tensión inesperada.

Lo que comenzó como una jornada rutinaria en Pasapalabra se convirtió en un episodio que ha dejado a los seguidores del programa boquiabiertos. Manu, el popular concursante madrileño con más de 250 participaciones a sus espaldas, tomó una decisión drástica y sin previo aviso. Con un “basta”, interrumpió el ritmo habitual del programa, dejando descolocados tanto al público como al presentador, Roberto Leal.

Durante La Pista, una de las pruebas más simbólicas del formato, ninguno de los concursantes logró identificar la canción, provocando un insólito empate en blanco. Con su habitual chispa, Roberto Leal intentó quitar hierro al asunto: “Se llevan El Rosco”, bromeó. Sin embargo, lo que vino después nadie lo vio venir.

Visiblemente alterado, Manu rompió su característico autocontrol y lanzó una crítica directa al conductor del programa. “Desde que dejaste de soltarnos frases motivadoras, hemos perdido el rumbo”, afirmó. Su comentario, lejos de ser aislado, fue respaldado por Rosa, quien coincidió en que la falta de ese impulso emocional podría estar detrás de su racha negativa.

Intentando aliviar el ambiente, Roberto improvisó una frase motivacional al vuelo, pero el efecto fue más bien tibio. Lo que queda claro es que este episodio marcará un antes y un después en la historia reciente del programa, abriendo el debate sobre el impacto del ánimo y la psicología en los concursos de larga duración.