Se llama Chanel Terrero y tiene 30 años. Nació en La Habana pero de muy pequeñita sen instaló con su familia en Barcelona. Es cantante, actriz y bailarina. Ha participado en alguno de los más grandes montajes musicales de la cartelera teatral española; como 'Mamma Mia', 'El Rey León' y 'Flashdance'. Ha formado parte del cuerpo de baile de Shakira en los MTV y ha participado en series como 'Águila Roja' y 'El secreto del puente viejo'. Tras ganar la primera edición del Benidorm Fest, derrotando a la gran favorita, Rigoberta Bandini, representará a España en Eurovisión con el tema 'SloMo', un ritmo latino que mezcla castellano e inglés.

Chanel aceptó el proyecto de intentar ir a Eurovisión cuando la contactó Tony Sánchez-Ohlsson, uno de los autores de 'SloMo'. Según explica en una entrevista concedida a EL PERIÓDICO, “él ya me conocía de los musicales en que he trabajado. Me dijo que tenía una canción para mí, que me pegaba mucho. Me puso en contacto con Leroy Sánchez, otro de los autores, le canté la canción a modo de cásting, le gustó y a partir de ahí empezamos a trabajar superduro”.

Antes de llegar a Benidorm no contaba para nada en las apuestas, apenas le daban un 5% de posibilidades de ganar, pero fue actuar en la primera semifinal y destrozar cualquier pronóstico. La artista se impuso al resto de rivales de la noche y se plantó en la final como una de las grandes favoritas junto a Rigoberta Bandini. Esta noche, y en una votación de infarto, ha sumado 96 puntos, cinco por delante de Bandoni y seis más que Tanxugueiras, que también contaban entre las favoritas. “La propuesta de 'SloMo' se hizo desde el principio para ir a Turín. Y para nosotros Benidorm no ha sido solo un escalón sin más; ha sido una muestra de lo que podemos llegar a hacer en Eurovisión”.

La puesta a punto para participar en Benidorm fue muy dura; “desde que supe que estaba dentro del 'show' no he parado de trabajar; físicamente, a nivel psicológico y espiritual y con la voz. Este es un trabajo muy duro pero también muy gratificante, porque pronto ves los resultados. Todos los que formamos parte del equipo hemos trabajado muy duro; esto no sería lo mismo sin ellos. Es algo muy exigente; el otro día, por ejemplo, estuvimos hasta las 12 de la noche ensayando la coreografía una y otra vez; hubo quien se acostó a las 8 de la mañana, trabajando hasta entonces. Esto requiere dedicación; es una mezcla de ilusión y trabajo”.

Autoxigencia

Y es que la exigencia consigo misma es uno de sus mandamientos personales; “mi mejor amiga me dice que soy demasiado exigente, pero es que creo que nunca se aprende del todo; es decir, siempre hay algo que mejorar, algo que aprender. Y eso es lo que te hace crecer como artista y como persona. Y me centro en eso; en absober, en aprender”. Y pone como ejemplo lo que sintió al ver a Ruth Lorenzo interpretar una versión muy particular del 'Bailar pegados' de Sergio Dalma en el Benidorm Fest: “Viéndola, me subí encima de la silla. No podía gritar porque tenía que guardarme la voz, pero me puse a dar palmas, parecía una niña pequeña. Con cada cosa que hacía, cada mirada suya a cámara, con cada gesto suyo yo pensaba: ¡Dios!, cuánto hay que aprender de ella! Y así constantemente. Soy exigente porque me gusta crecer como artista”. Es desde esa misma exigencia que no se permite a sí misma confiarse y dormirse en los laureles; “me hace ilusión ver que hay mucha gente que me apoya, pero esto no me ciega. Estoy muy en tierra. Y soy muy consciente de que el trabajo todavía no está al 100% y de que siempre puede estar mejor”.

Ahora, a Turín

Ahora empieza el camino hacia Turín. La canción y la puesta en escena que hemos visto en el Benidorm Fest seguramente serán pulidas y mejoradas. Por delante, aún, más de tres meses de trabajo. Como se declara seguidora de Eurovisión, Chanel no comparte las críticas al festival ni considera que tomar parte en él vaya a poner en riesgo su carrera; “al contrario; es una oportunidad, ¡son puertas abiertas! Es el festival de la canción por execelencia; el más importante del mundo. Para mí es algo maravilloso”, asegura.

Chanel lleva años en los escenarios. El talento, dice, le viene de familia; “mi madre es muy artista; te hace un monólogo de la nada. Yo creo que seguramente he heredado un poquito de eso. Mi tía canta superbién, aunque nunca se ha dedicado profesionalmente a ello”. Chanel lo tenía claro desde muy pequeña; “mi madre me vio aptitudes; yo tenía mucha elasticidad y me apuntó a gimnasia rítmica. Tuve que dejarlo porque sufrí acoso por el color de mi piel. Al final me apunté a una escuela de baile y la directora también me vio aptitudes. Me dijo que tenía que trabajar duro para salir al ruedo en condiciones. Yo entonces tenía 9 años. Estuve muchos años trabajando para poder decir que siento que estas tres disciplinas son las mías; cantar, bailar y actuar”.

El recorrido no siempre fue fácil; Chanel reconoce que ha habido momentos duros “pero me sirvieron como aprendizaje”. A la memoria, por ejemplo, le vienen las veces en que sintió “que me apartaban por ser bailarina; como que me decían ‘tú no vales como cantante o como actriz’. Y es duro porque tú sabes que estás preparada para ello”. También ha tenido momentos de gloria como el de su victoria en Benidorm; “estuve con Steven Spielberg, haciendo un casting para su película 'West Side Story'. De todo el mundo, eligió a 5 actrices para el personaje de Anita y una de las aspirantes era yo. Ese momento en mi carrera fue muy heavy, darle la mano a Spielberg fue muy fuerte”.

El apoyo de la familia

Tanto en los momentos dulces como en los amargos, Chanel explica que su familia siempre ha estado a su lado, apoyándola “desde el minuto uno. Son muy importantes para mí. Me apoyaban cada vez que iba a un casting de pequeña; me apoyaron cuando me fui a vivir a Madrid y están ahí conmigo en cada estreno que hago”. Durante la semana del Benidorm Fest los ha tenido a su lado; “pidieron fiesta en el trabajo y vinieron para apoyarme. A mi hermana, en las votaciones de la semifinal, le entró un ataque de ansiedad; no podía respirar, ¡pobrecita!”.

Gracias al éxito del Benidorm Fest, de Chanel ahora se conocerá principalmente su faceta como cantante. Ella, no obstante, lo tiene claro: esto no significará que tenga que renunciar a su alter ego como bailarina ni al de actriz: “Yo me considero una artista 360, que canta, baila y actúa. Toda mi vida me he dedicado a esto. ¿por qué tiene que cambiar la cosa ahora?. Fuera de España no hay tanto reparo a ver actores que de repente cantan superbien. ¿Por qué no compaginar las tres cosas?”. Cuando se le pide cuál le gusta más de esas tres actividades, Chanel es contundente: “¡Eso es como preguntarme a quién quiero más, si a papá o a mamá! Las tres son mi pasión.