DEBATES PARA EL 23J

Sánchez intenta coger aire y desinflar la ventaja de Feijóo

El presidente repite con su propuesta de seis 'cara a cara' la estrategia que ya usó en el Senado. Génova asegura que "no ha digerido" el 28M, que plantea "ocurrencias" y que no les va a marcar la agenda

Pedro Sánchez.

Pedro Sánchez. / EFE

Marisol Hernández, Paloma Esteban

En el verano de 2022, cuando Alberto Núñez Feijóo se puso por delante en las encuestas -hasta el CIS en el mes de julio llegó a reflejar que tenían una ventaja de casi dos puntos- en Ferraz y La Moncloa se dieron cuenta de que debían hacer algo para frenarlo. En realidad, la opinión pública no conocía mucho al dirigente gallego pero la imagen que proyectaba, tras muchos años presidiendo la Xunta, era buena. Ahí se puso en marcha la operación 'desmontar a Feijóo', destinada a que el electorado, el más central del segmento socialista, entendiera que ni era tan moderado ni su gestión había sido tan buena.

El PSOE perdía entonces medio millón de votos a favor de PP. Y había que pararlo como fuera. Entre las fórmulas escogidas se optó por celebrar debates monográficos en el Senado para visualizar que frente al presidente del Gobierno no había una alternativa sólida. La propuesta de seis debates con el líder del PP, que este lunes lanzó Pedro Sánchez, persigue el mismo objetivo: coger aire tras el varapalo del 28M y evidenciar que Feijóo "más allá de derogar el sanchismo, no tiene ningún proyecto".

"Siempre se quejaba en el Senado", apuntan en Ferraz, que necesitaba "mucho más tiempo para exponer sus ideas y contraponerlas con el presidente del Gobierno". Pues "ahí lo tiene", ironizan. "Es curioso que el jefe de la oposición no quiera debatir. Es otra cosa que tendrá qué explicar". Sus sarcasmos tienen también la réplica en el PP, donde subrayan que "para hacerlo tan mal" en la Cámara Alta y "no estar adaptado a Madrid", como los socialistas mantenían, a Feijóo le ha ido muy bien en las elecciones autonómicas y municipales. Mucho mejor que a Sánchez, remachan.

Lo cierto es que el plan del PSOE de seis debates -uno por cada semana que queda hasta el 23Jbusca inundar la conversación política y que el presidente coja aire. Después de mostrarse en los últimos días tocado por el 28M este lunes reapareció rehecho y con la advertencia de que no renuncia a vender su gestión. En las jornadas de ElDiario.es, en las que anunció su propuesta, destacó que "me van a escuchar hablar y mucho de economía" y "de lo que importa e interesa a la gente". Aunque, también, advirtió "nos vamos a defender de los bulos y las mentiras, más que hasta ahora".

La realidad es que los socialistas no saben si Feijóo se avendrá a algún 'cara a cara'. "No querrán debates, les incomodan. Ojalá". En el Gobierno sostienen sin ambages que a ellos les interesa porque, reiteran, "no tiene proyecto ni propuestas". Piensan que su celebración, aunque sólo sea de uno, les "beneficia". Pero la presión sobre el líder popular se ha ejercido sin garantías. Por eso Ferraz se ha apresurado a dar el sí a los cuatro que ya les han planteado: RTVE, A3Media, Mediaset y Prisa. Y el secretario de Organización, Santos Cerdán, se ha puesto en contacto por carta con el coordinador general del PP, Elías Bendodo, para reunirse cuanto antes y cerrar las condiciones de la media docena de debates.

El PP sigue convencido de que en Moncloa “no han digerido” lo que ocurrió la noche del 28 de mayo, y a eso atribuyen la “ocurrencia” de los seis cara a cara, tras una primera semana “muy agresiva y a la desesperada” desde que Sánchez anunciara el adelanto electoral. El hilo de vídeos que ha ido poniendo en circulación el PSOE, con lapsus de Borja Sémper o ridiculizando a Feijóo por no hablar en inglés, fue recibido en Génova como un síntoma de “debilidad total” y “de no saber qué hacer” para una remontada que perciben como “imposible”.

"No vamos a atender sus excentricidades diarias"

El objetivo de los conservadores esta semana era optar por un perfil bajo, entendiendo que el foco debe estar puesto en la “mala situación de los socialistas” y muy especialmente en lo que ocurra entre Sumar y Podemos. De ahí, que no pretendan hacer grandes anuncios ni contribuir a discusiones que quiten presión a la izquierda. Además, en el entorno de Feijóo insisten en que “no dejarán que Sánchez y sus anuncios” les vayan marcando la agenda, en un momento de clara ventaja para el PP.

“Hablaremos de debates cuando los medios que los organicen pongan encima de la mesa fechas y condiciones. No vamos a atender a las excentricidades diarias del presidente del Gobierno”, insisten en el partido de Feijóo. La tensión de las próximas seis semanas irá en aumento. El líder conservador tiene muy difícil no considerar las peticiones de los debates, pero en Génova señalan que en 2019 (para la repetición de noviembre) solo se produjo uno a cinco entre los principales candidatos. También reiteran que Sánchez no quiso darle ningún 'cara a cara' a Pablo Casado y que ahora le entran “las prisas por tener uno cada semana”.

Génova sobre los debates: "Los habrá"

La sensación generalizada dentro del PP es que el 28M empezó un cambio de ciclo que no podrá frustrarse en un mes y medio. Pero tampoco esconden dirigentes del PP que los debates “no son el principal fuerte” para Feijóo. Todos los que ha hecho en más de una década los ha hecho con el traje de presidente de la Xunta. Reconocen que esta campaña tiene que ver mucho con “no meter la pata” y dejar que la ola del cambio actúe. Y una sobreexposición en debates televisados puede perjudicar más que beneficiar al líder popular.

En Génova no aclaran cuántos cara a cara estaría dispuesto a aceptar Feijóo. Sí dejan claro “que los habrá”. Y algunos cargos apuntan a que al líder del PP, igual que a Sánchez, le viene bien que se produzcan debates entre los dos grandes candidatos, dejando a un lado a sus competidores a izquierda y derecha. No solo por lo que implicaría tener al lado a Santiago Abascal mientras Sánchez repite que será el socio de un Gobierno de Feijóo, sino porque el dirigente gallego está centrado en aglutinar todo el voto de la derecha bajo sus siglas siguiendo el ejemplo de Andalucía: “Si está claro que Feijóo será el próximo presidente, mejor que lo sea sin necesitar a Vox”, repiten en el núcleo duro del PP. Bajo esa premisa, no esconden que cuanto menos salga Abascal entre las opciones, mejor.