LEY DEL 'SÓLO SÍ ES SÍ'

ERC y EH Bildu piden desmontar la reforma de la ley del 'sólo sí es sí' y dejan a Sánchez en manos del PP

Las enmiendas de los grupos independentistas catalán y vasco plantean mantener la esencia de la ley del 'sólo sí es sí', el consentimiento, y colisionan por tanto con la propuesta del PSOE

La portavoz de EH Bildu en el Congreso, Mertxe Aizpurua, en el Congreso.

La portavoz de EH Bildu en el Congreso, Mertxe Aizpurua, en el Congreso. / EP

Violeta Molina Gallardo, Ángel Alonso Giménez

ERC y EH Bildu han dado a conocer este jueves sus enmiendas conjuntas a la proposición con la que el PSOE quiere reformar la ley del 'sólo sí es sí' y evitar las rebajas de condenas a delincuentes sexuales que se han venido sucediendo desde hace seis meses. Las propuestas de las formaciones independentistas catalana y vasca son malas noticias para los socialistas porque desmontan y desnaturalizan su iniciativa. Republicanos y abertzales quieren mantener la esencia penal de la legislación vigente (el consentimiento) y acometer otro tipo de ajustes. Sus postulados encajan en los criterios del Ministerio de Igualdad.

El bloque argumental y penal que forman Unidas Podemos, ERC y EH Bildu aboca al PSOE de Pedro Sánchez a apoyarse en el PP si quiere que su proposición salga como está redactada, o al menos, manteniendo su núcleo central. Socialistas y populares coinciden en la apuesta por incluir escalones en los delitos de agresión sexual y violación en función de si hay violencia, intimidación o anulación de la voluntad. Quieren incorporar tales factores como subtipos. Irene Montero y su partido no. Que sean agravantes, defienden, al igual que ERC y EH Bildu.

Así que los independentistas catalanes y vascos abogan por mantener una pena de 2 a 8 años por agresión sexual y de 7 a 15 por violación “cuando para la comisión de la agresión sexual se hubiera empleado violencia o intimidación, o la misma vaya acompañada de actos que revistan carácter particularmente degradante o vejatorio”, según especifican en la enmienda.

No volver al Código Penal anterior

Los grupos que dirigen Gabriel Rufián y Mertxe Aizpurua en el Congreso han terminado las enmiendas unos días antes del tope de la nueva prórroga acordada por la Mesa, que es el 10 de abril. El portavoz socialista, Patxi López, planteó hace una semana que no habría más demoras y marcó una fecha para aprobar en pleno el dictamen que haga la Comisión de Igualdad: el día 20 de este mes. 

La toma en consideración de la proposición del PSOE se debatió y votó el 7 de marzo, un día antes del Día Internacional de la Mujer. Se aprobó la admisión a trámite porque socialistas y populares (aunque también PNV y PDeCAT, entre otros grupos) ejercieron su mayoría incontestable, 208 escaños entre ambos. La tensión se hizo palpable, sin embargo, porque Unidas Podemos criticó sin tibieza al PSOE, en el que ha sido posiblemente el enfrentamiento más crudo entre los socios de Gobierno en la tribuna parlamentaria.

Aquella tarde, EH Bildu, representado por la diputada Bel Pozueta, reprochó el cambio que desean los socialistas porque es volver al “paradigma” del Código Penal anterior, el que Podemos denomina como “el Código Pebal de la manada”, en alusión a la violación grupal de una mujer en Pamplona durante los “sanfermines” de 2016. “Creemos que es posible hacer los cambios técnicos necesarios manteniendo el espíritu y el pilar de esta ley, el consentimiento, sin tener que volver a demostrar si hubo o no violencia, si nos resistimos o no, si nos negamos lo suficiente o no”, afirmó Pozueta. 

Pilar Vallugera, de Esquerra, criticó que un número no menor de jueces no estuvieran interpretando la ley del "sólo sí es sí" correctamente, ya que otro buen número sí lo estaba y está haciendo.

EH Bildu y ERC dejaron claro, por tanto, que no estaban de acuerdo con la propuesta socialista. Exigieron a los socios de la coalición, como antes hicieron Rufián y Aizpurua, que llegaran a algún entendimiento antes de la toma en consideración. La fase de inclusión de enmiendas resultaría más ágil de esta forma. Pero no fue posible. A tenor de las enmiendas registradas conjuntamente por ambos, no se divisa un solo destello de acuerdo con el PSOE.

Nuevas agravantes y otros cambios

Las formaciones independentistas, además de solicitar que las penas para delitos sexuales agravados se mantengan de 2 a 8 años de prisión para la agresión sexual y de 7 a 15 años para la violación, también plantean la inclusión de nuevas agravantes, más allá de la violencia y la intimidación.

Proponen agravar la pena de prisión cuando el agresor sea una persona allegada a la víctima o funcionario público, personal público o agentes de cualquier organismo o institución pública que se hubieran prevalido de su condición.

También pretenden que se agrave el castigo cuando la agresión “se haya registrado mediante dispositivos tecnológicos”.

Más allá del contenido de la reforma presentada por los socialistas para endurecer el castigo de las agresiones sexuales, EH Bildu y ERC han aprovechado la ventana de oportunidad que representa esta proposición de ley para sugerir otros cambios en la ley del sólo sí es sí.

Así, aspiran a incluir en la legislación el impulso de protocolos para la prevención, detección y erradicación de las violencias sexuales en todos los niveles educativos, ya sea en centros públicos o privados.

En este apartado, también ponen encima de la mesa que cuando el personal docente o investigador mantenga una relación sexual o romántica con un alumno o alumna a quien dé clase o supervise, se tenga que proceder a una reorganización “para evitar potenciales abusos de poder y conflictos de intereses”.

Algunas enmiendas relevantes hacen referencia a la esfera de los medios de comunicación. Por ejemplo, la que exige que los medios velen por el derecho al honor y la intimidad de las víctimas y sus familias, “evitando en todo momento proporcionar detalles morbosos de las agresiones o informaciones que permitan identificar el domicilio u otros datos de carácter personal, y no difundirán pruebas que estén bajo secreto de sumario”.

Las formaciones políticas insisten en que el incumplimiento de esas pautas ahonda en la revictimización y “podrá acarrear consecuencias penales o administrativas”. 

Se trata de una medida de “contención al ánimo lucrativo y morboso de los medios” ante las “numerosas y repetidas revictimizaciones ejercidas”. Los medios, inciden, deben evitar los mensajes que pudieran responsabilizar a la víctima de la violencia ejercida.

Preocupan a estos dos partidos independentistas las informaciones falsas que atentan contra la concienciación a favor de la igualdad, cada vez más numerosas. Por ello, solicitan que la ley del sí es sí establezca un sistema público de alertas para la detección de datos e informaciones falsas.

Entre los numerosos cambios que piden introducir en la ley orgánica de garantía integral de la libertad sexual, ERC y EH Bildu consideran muy necesaria la formación obligatoria en perspectiva de género y violencia contra las mujeres de toda la carrera judicial y la abogacía.

Con el objetivo de disponer de más y mejores datos sobre violencias sexuales, se quiere que el el Consejo General del Poder Judicial tenga que recopilar, analizar y publicar periódicamente estadísticas sobre el número de denuncias, órdenes de protección y medidas cautelares, tasas de condena y archivo de los delitos sexuales.