El veterano dirigente Rafael Pillado, nacido en Cervo (Lugo) en 1942 y vinculado desde la dictadura franquista con CCOO y el Partido Comunista de España, ha fallecido este lunes, han confirmado a Efe fuentes de su entorno familiar.

Militante de ambas organizaciones desde su juventud, fue protagonista de los sucesos del 10 de marzo de 1972 en Ferrol, en cuyo astillero de Bazán fue trabajador, en los cuales los disparos de la Policía franquista durante una protesta en demanda de mejoras laborales causaron la muerte de los operarios Amador Rey y Daniel Niebla.

Residente en la ciudad ferrolana desde su infancia, el pasado 7 de enero recibió una de las insignias de oro del Ayuntamiento de Ferrol en la jornada del patrón local, San Julián, uno de los últimos actos en los que se pudo ver al dirigente.

La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha lamentado este lunes la muerte de Pillado, con el que mantuvo una amistad personal, y ha asegurado que se pierde "a un luchador incansable por la democracia y por los derechos laborales".

"Con mucha tristeza te despedimos, querido compañero, pero tu legado en la defensa de las víctimas del amianto y de las trabajadoras y trabajadores permanecerá por siempre", ha escrito en redes sociales.

En septiembre de 2022, Pillado, respaldado por personalidades como la veterana abogada Cristina Almeida, compareció en los juzgados de Ferrol, donde se celebró la vista por su demanda contra Navantia por exposición al amianto durante su etapa como empleado de la extinta Bazán.

El militante comunista había comunicado al inicio del pasado año que padecía un mesotelioma y relató que el personal médico que lo examinó le había pronosticado "un año de vida" y que los responsables de la compañía estatal para la que trabajó "conocían las consecuencias" de recurrir al amianto para sus actividades.