El comienzo de la larga carrera electoral de 2023 mantiene en todo lo alto el pulso entre PP y PSOE, pero el primer mes del año le ha ido mejor a los populares que a los socialistas. Pasado enero, el PP de Alberto Núñez Feijóo sigue al alza en primera posición y podría sumar una ajustada mayoría absoluta con la ultraderecha de Vox. El PSOE de Pedro Sánchez, en cambio, han retrocedido un poco más en enero en este primer mes de un año con muchas citas electorales pero con una gran batalla común: la pugna entre izquierdas y derechas por la hegemonía del tablero político español durante los próximos cuatro años.
2022 volvió a demostrar la volatilidad de un tablero electoral muy propenso a las sacudidas que proporciona la economía o a los tropiezos de Gobierno y oposición. El líder del PP parece haber superado el desgaste por el bloqueo en la renovación del Poder Judicial y el Tribunal Constitucional, pero al presidente del Gobierno aún parece pasarle factura la rebaja del delito de malversación y el fiasco de la ley del 'solo sí es sí'.
El promedio de todas las encuestas sobre las elecciones generales publicadas desde septiembre de 2022 mantiene al PP en primera posición con 3,4 puntos de ventaja sobre el PSOE, dos décimas más que cuanto acabó el año. Ahora Feijóo lograría el 30,4% de los votos, una décima más que en diciembre. Por su parte, Sánchez obtendría el 27% de los sufragios, una décima menos que a finales de 2022.
Convertida esa media en escaños, la diferencia a favor de los conservadores ha subido a 27 escaños, seis más que hace un mes. El PP conseguiría hoy 131 diputados y el PSOE, 104. En un mes, Feijóo ha ganado dos escaños y Sánchez se ha dejado cuatro. En abril, cuando el expresidente gallego asumió el liderazgo del partido, el presidente del Gobierno estaba 17 escaños por delante del PP. Desde entonces, los populares han ganado 25 diputados y el PSOE ha perdido dos.
Los cálculos realizados por EL PERIÓDICO, del grupo Prensa Ibérica, a partir de una fórmula empleada por Ivan Serrano, investigador del IN3 (Internet Interdisciplinary Institute) de la UOC, corresponden a la media ponderada de los principales sondeos publicados. La ponderación se realiza, como en otras fórmulas de este tipo, en función del tamaño de la muestra (cuanto más grande, mayor valor) y de la fecha del trabajo de campo (cuanto más reciente, más significativa).
Los respectivos vasos comunicantes de PP y PSOE (Vox y Unidas Podemos) apenas se ven afectados por el crecimiento o retroceso de populares y socialistas. Pese a la subida del Feijóo, la extrema derecha de Santiago Abascal también suma un escaño, hasta los 45 diputados, y repite el 14% de los votos que tenía en diciembre. Desde su revés en las elecciones andaluzas, Vox ha perdido cinco puntos y medio y 14 escaños, pero podría blindar sin problemas su condición de tercera fuerza política del Congreso y sería determinante para que Feijóo llegase a la Moncloa.
Pese a que continúan los choques internos en el Gobierno por la ley del 'solo sí es sí' y la incertidumbre en torno al proyecto de Yolanda Díaz, Unidas Podemos suma dos décimas en un mes, hasta el 11% de los votos, y repite los 26 diputados que tenía a finales de 2022.
El resto de formaciones se mueven, de momento, en cifras similares a las de noviembre: ERC obtendría 12 parlamentarios; Junts per Catalunya, 7; PNV, 6; Más País, 3; y España Vaciada, 1. Minado por las fracturas internas, las encuestas continúan dejando a Ciudadanos fuera del Congreso.
Estos promedios dejan a Feijóo en disposición de alcanzar la Moncloa con el apoyo de Vox, pues ambas fuerzas sumarían 176 escaños, tres más que en diciembre y justo en el listón de la mayoría absoluta. En todo caso, las derechas siguen muy por encima de los 141 parlamentarios que cosecharon en las elecciones de 2019. Por el contrario, la suma de los actuales socios del Gobierno (130 escaños) ha retrocedido en cuatro diputados en el último mes y continúa muy por debajo de los 155 representantes actuales.
