Ataque en Algeciras

Marlaska confirma que el detenido actuó solo y no estaba en ningún radar por radicalización

"Todas las hipótesis siguen abiertas", insiste el ministro de Interior

Fernando Grande-Marlaska.

Fernando Grande-Marlaska. / EFE

Isabel Morillo

El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha comparecido en Algeciras para asegurar que el Gobierno no prevé “ningún efecto llamada” por el suceso acontecido este miércoles en la ciudad y que está siendo investigado en la Audiencia Nacional como terrorismo yihadista. Marlaska fue especialmente cauto con la naturaleza del acto que está aún siendo investigado “de forma muy incipiente” y que permanece bajo secreto judicial, sin descartar la hipótesis de terrorismo pero tampoco que se trate de un acto aislado de una persona afectada de una enfermedad mental. “Todas las hipótesis están abiertas”, sostuvo en varios momentos de su comparecencia.

Interior dejó claro que no hay ninguna otra persona vinculada con el detenido. Será el material encontrado por la Policía Nacional durante el registro, varias memorias de USB, y en el móvil del detenido, donde habría extractos de conversaciones en chats islamistas radicales, fundamentales para determinar el alcance de lo ocurrido en Algeciras. El ministro no confirmó qué material halló la Policía en el registro, “algunos objetos”, pero sí admitió que permitirá desentrañar la naturaleza del atentado violento del pasado miércoles. Tampoco desveló si el detenido ha sido sometido a algún examen médico psiquiátrico.

Marlaska aseguró que el detenido nunca ha estado en el radar de ningún servicio nacional por radicalización, pero tampoco en ninguna de las bases de datos de los distintos países aliados de España donde haya tenido alguna residencia. Su único expediente es administrativo por inmigración irregular.

“No hay ninguna otra persona involucrada en los hechos”, recalcó. “La investigación está en el inicio, se sigue por los cauces de que pueda ser de naturaleza terrorista, pero todas las hipótesis siguen abiertas”, afirmó Marlaska.

El titular de Interior, que se desplazó este medio día a Algeciras desde Estocolmo y acudió a dar el pésame a la familia y allegados de la víctima, el sacristán Diego Valencia, señaló que la alerta terrorista en España está en el nivel cuatro desde junio de 2015 y que el Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO) se reúne de forma permanente y no revisará ese grado de protección hasta que avance más la investigación.

El ministro defendió con firmeza que no hay descontrol sobre los ciudadanos que permanecen en España con una orden de expulsión cursada, como consta que tenía desde junio el detenido Yassine Kanjaa, que estaba en el país de forma irregular.

Los procedimientos son muy largos en los tiempos, pero todos se cumplen y luego se materializa la expulsión al país de residencia. España tiene una de las mayores tasas de materialización de las órdenes de expulsión. Se trabaja y se controla a todos los ciudadanos que se encuentren en situación irregular, con un índice de retorno más alto de la UE”, aseguró.

Marlaska, que respondió a las quejas del PP por no haber comunicado el Gobierno lo ocurrido, aseguró que él mismo habló con el presidente de Andalucía, Juan Manuel Moreno, y que el secretario de Estado telefoneó a la portavoz popular en el Congreso, Cuca Gamarra. Eludió el ministro responder a las declaraciones de la extrema derecha de Vox, convencido de que España es una sociedad “democrática adulta que sabe vivir en diversidad”.