El grupo socialista en el Congreso ha pedido este lunes, durante la reunión de la Junta de Portavoces, que el viernes próximo se decida ya la inclusión de la reforma del Código Penal para acabar con el delito de sedición en el orden del día de un nuevo pleno que se celebrará el día 24 de este mes, han informado a El Periódico de España, del grupo Prensa Ibérica, fuentes parlamentarias.

La intención inicial de los socialistas era que la Junta de Portavoces de este lunes tomara la decisión, pero es un punto que no estaba en la agenda de la sesión. Alterar la agenda requiere la unanimidad de los grupos. Como no ha sido el caso, otra Junta con otro orden del día deberá hacerlo. Hay fecha: el viernes.

Lo que sí estaba en la agenda de la Junta de este lunes es el debate y eventual aprobación del dictamen sobre la aplicación de un nuevo gravamen temporal a las eléctricas y a los bancos. Y sí estaba el debate y eventual aprobación de otro dictamen, sobre la nueva ley de cooperación. Ambas cuestiones se verán el jueves 24 de noviembre.

Un pleno diferente

Para ello, se va a convocar otro pleno. El que estaba fijado se va a dedicar íntegramente a la aprobación del proyecto de presupuestos generales del Estado, ya con las enmiendas pactadas en su contenido. Se hará necesaria, por tanto, la celebración de un pleno más, cuyo orden del día componen de momento esos dos asuntos, el gravamen y la nueva ley de cooperación.

Falta por incluirse la admisión a trámite de la proposición de ley registrada por el PSOE y por Unidas Podemos para cambiar el Código Penal en varios aspectos, entre ellos el tipo de la sedición. Una nueva Junta de Portavoces, el órgano que perfila las agendas de los temas a tratar en el pleno, tendrá lugar el viernes para que así suceda.

Se confirman por tanto las prisas del Gobierno por tramitar la reforma del Código Penal, que alude a cambios en delitos contra la integridad moral, pero no sólo: está ese nuevo tipo de desórdenes públicos que el Ejecutivo, en alianza con formaciones nacionalistas e independentistas, sus principales aliados parlamentarios (hablamos de ERC, PNV y EH Bildu). Cuando el viernes pasado registraron la proposición de ley, tanto el portavoz socialista, Patxi López, como el presidente de Unidas Podemos, Jaume Asens, expresaron con claridad sendos deseos de que el trámite se haga cuanto antes. Asens llegó a elucubrar con la posibilidad de que se aprobara antes de final de año.

Si el jueves 24 de noviembre, sale adelante la toma en consideración de la proposición, la Mesa decidirá a qué comisión envía la propuesta. Este órgano parlamentario fijará un calendario. Será un visto y no visto. Las enmiendas se negociarán con celeridad, incluidas las que aludan a cambios en el tipo de la malversación, lo que el Gobierno no ha rechazado. Es muy probable, dadas las prisas, que el 15 de diciembre el texto salga del Congreso rumbo al Senado, pero no se puede descartar ni mucho menos que tal paso lo dé la Cámara Baja el 1 de diciembre, antes del puente de la Constitución.