El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, cree que la cumbre de la OTAN que arranca oficialmente este miércoles en Madrid en un contexto marcado por la guerra de Ucrania supondrá un “punto de inflexión histórico” por las decisiones que los aliados adoptarán en las dos jornadas que durará la cita. Enviará, además, un claro mensaje a Vladimir Putin, el presidente ruso que, con la invasión de Ucrania el pasado 24 de febrero, ha roto las reglas del actual orden internacional provocando la primera confrontación entre dos ejércitos convencionales desde la segunda guerra mundial.

“La guerra de Ucrania representa un ataque a un orden internacional basado en reglas. Los principios que garantizan la paz entre las naciones, como la soberanía y la integridad territorial, han sido quebrantados de forma dramática. Por eso, aquí juntos en Madrid hoy, mandamos un mensaje muy fuerte, muy claro a Putin: No vas a ganar”, ha dicho en el Foro de debate paralelo a la cumbre organizado por el Real Instituto Elcano en el recinto de IFEMA. 

En su opinión, hay que “proporcionar a los aliados las herramientas adecuadas para poder responder con fuerza a los desafíos de nuestro tiempo”. La primera decisión de la Cumbre, y la más importante, será el respaldo al nuevo concepto estratégico, la hora de ruta de la organización para la próxima década.

Madrid preparará a la alianza para el futuro “incierto” que nos espera. “Estamos viviendo tiempos turbulentos y vamos a tener que hacer frente al futuro con decisión y responder a nuevos competidores y la nueva emergencia de otros”, ha explicado Sánchez a los asistentes al foro.

El desafío de hoy, a su juicio, no se limita a la esfera militar convencional, como se pone de relieve por la mayor importancia de las llamadas amenazas híbridas o la crisis climática.

La cumbre reforzará el despliegue en flanco oriental para hacer frente a la amenaza de seguridad más preocupante que se cierne sobre Europa desde la segunda guerra mundial y adoptará decisiones sobre el desarrollo de nuevos instrumentos para poder innovar de manera que la OTAN esté mejor preparada y con capacidades de vanguardia. Eso requerirá, adelantó Sánchez, un debate sobre la financiación.

Los aliados reunidos en la capital española deberán también responder a la siguiente pregunta: ¿qué tipo de OTAN queremos en los próximos años para garantizar la paz y la estabilidad? Su respuesta, según el anfitrión, dependerá del diagnostico del contexto geopolítico actual y de las previsiones de lo que nos espera en el futuro inmediato.

“Hay una competencia entre las grandes potencias que no es nueva pero lo que define esta era es el cambio del equilibrio de poder tras el relativo declive de algunas naciones y el refuerzo de la influencia de otras. Esto crea nuevas fricciones, sin embargo lo que nos preocupa es que se cuestione la naturaleza del equilibrio logrado en las últimas siete décadas”, argumentó el presidente.

En su opinión, no podemos tolerar es que los países violen el sistema de normas internacionales como a su juicio ha sucedido en Ucrania. “El orden internacional basado en normas y reglas va a prevalecer. Ucrania y la paz prevalecerán”, advirtió.

El presidente recordó que en poco más de cuatro meses el conflicto ha provocado un “cambio drástico” en Europa: Suecia y Finlandia se han alejado de su neutralidad histórica, Dinamarca ha abandonado su clausula de exclusión y Alemania ha dejado atrás su decisión tradicional de recortar el gasto militar. A juicio de Sánchez muchas naciones admiten la necesidad de aumentar el gasto en defensa y lo harán lo antes posible.

“Nuestros objetivos son paz y seguridad, por lo tanto necesitamos una alianza atlántica que proporcione paz y seguridad como lo ha estado haciendo para unos 950 millones de personas desde su fundación. Ha llegado el momento de reforzar nuestra alianza para hacerle frente conjuntamente a las amenazas de seguridad”.

El objetivo es lograr paz, estabilidad, certidumbre y certezas y para ello los aliados tienen que trabajar juntos para tener los instrumento necesarios. “La guerra en Ucrania nos ha enseñado que no se puede dar nada por hecho y que hay que defender estos valores”, resumió Sánchez.

Nueva ampliación

 Sánchez ha dicho que la cumbre de Madrid será, además, recordada por la nueva ampliación que protagonizarán Suecia y Finlandia tras abandonar su tradicional política de neutralidad para solicitar su ingreso en la organización atlántica.

 Fue también en Madrid, en 1997, cuando la república Checa, Hungría y Polonia empezaron a negociar su entrada. Ahora hay “dos democracias europeas más que quieren acceder y que reforzarán la OTAN”. “Esta es una excelente noticia”, subrayó el presidente.