El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha tildado de "bulos" y "falsedades" las interpretaciones de trato de favor a cambio de votos abertzales que la derecha difunde sobre las escuchas contenidas en un informe de la Guardia Civil que relata contactos del secretario de Instituciones Penitenciarias, Angel Luis Ortiz, con el mediador de presos de ETA Joseba Azkarraga acerca de acercamientos a cárceles vascas.

"No hay, no ha habido ni habrá negociación para la aplicación de la ley penitenciaria", ha repetido el ministro como respuesta a las preguntas que le han dirigido el Partido Popular y Vox durante la sesión de control al Gobierno en el Congreso este miércoles.

"No vengan aquí con bulos. Aquí se ejerce la ley penitenciaria en el tratamiento, la progresión, la elección de centros", ha respondido el titular de Interior al diputado Jaime Miguel Mateu Istúriz . El parlamentario popular ha descrito como "negociación secreta y opaca" con "el sanguinario Kubati como interlocutor privilegiado" los mensajes que se intercambiaron Ortiz y Azkarraga desde 2019, actuando el exconsejero vasco de Justicia como enlace de Sare y otras organizaciones lideradas por el histórico de ETA José Antonio López Ruiz, 'Kubati'.

575 traslados bajo el PP

Marlaska se ha defendido este miércoles de la ofensiva de la derecha recordando que entre 1996 y 2004, "mientras ETA mataba", el gobierno del PP trasladó a 575 presos "y sin avisar a las víctimas. Ahora los traslados de terroristas de ETA se hacen con transparencia comunicándoselo a las víctimas", ha relatado.

El ministro también ha repetido que "en ningún punto, en ningún folio del informe se dice que se ha incumplido la ley" y ha recordado que él mismo fue reiterado "objetivo directo" de ETA.

El Partido Popular y Vox han desplegado esta semana una importante ofensiva contra el Gobierno que pivota en torno a los difundidos contactos entre Prisiones, dependiente de Interior, y el mediador Azkarraga, pero sin demasiado éxito. Este martes, en el Congreso, no cosechó más que acusaciones de instrumentalización de las víctimas del terrorismo cuando planteó en el pleno la toma en consideración de un proyecto de ley para proscribir los ongietorris y homenajes a etarras excarcelados. La misma tarde, en el Senado, Marlaska recordó al senador popular Fernando Martínez-Maíllo que Instituciones Penitenciarias escucha a familiares de presos y a otros colectivos, como el de los condenados "por casos de corrupción del PP", sin que esos interlocutores determinen la política penitenciaria.

Este miércoles, el primer embate del líder popular, Pablo Casado, contra el presidente del Gobierno tras las elecciones en Castilla y León -"¿Está usted con los verdugos o con las víctimas?", le ha disparado- ha sido totalmente ignorado por Pedro Sánchez.

"Cloaca del sanchismo"

Vox ha participado en el cerco planteado al ministro del Interior con el diputado Ignacio Gil Lázaro formulando en la sesión de control del Congreso una pregunta que enlaza hipótesis con hipótesis: "¿Por qué ha ocultado que el Ministerio del Interior está en permanente contacto con representantes de los presos de ETA a fin de cumplir sus exigencias?"

Esos contactos son para el diputado de la formación de extrema derecha un "chalaneo miserable envuelto en un secretismo traidor" con "el dirigente de ETA que ordenó atentados contra cuarteles de la Guardia Civil para lograr ataúdes blancos, es decir: niños masacrados". Después de esta exposición, ha llamado "servil" e "inmoral" a Marlaska, y ha sentenciado que "Interior es la gran cloaca del sanchismo".

El ministro del Interior ha repetido: "No hay, no ha habido ni habrá ninguna negociación para la aplicación de la ley penitenciaria", y le ha recordado a Gil Lázaro que él "pidió beneficios pentienciarios para presos de ETA" cuando era portavoz popular de Interior y gobiernos de Mariano Rajoy movieron a 575 presos de ETA entre 1996 y 2004, "mientras nos mataban, nos asesinaban, nos secuestraban... Y usted estaba en silencio", ha argumentado recordando la etapa en la que fue juez de la Audiencia Nacional.

De fondo, y bajo el ruido parlamentario, las respuestas de Grande-Marlaska han contenido un reproche para el PP: "Ustedes se han apartado de la unidad de los partidos políticos democráticos que venció a la banda terrorista ETA".