El plan ideado por el Ministerio de Migraciones para autorizar el traslado de más de 3.500 africanos desde Canarias a la Península a corto plazo y, a partir de ahí, imprimir un cambio de estrategia sobre la política de derivaciones en el futuro, no parece contar por ahora con toda la colaboración que necesita por parte del ministerio del Interior, cuyo titular, Fernando Grande Marlaska, mantiene serias reservas a este cambio de criterio en su política hasta la fecha. Aunque esas derivaciones ya se están produciendo, según reconocen distintas fuentes oficiales, Interior está intentando rebajar algo las expectativas sobre la cifra real que alcanzará y, sobre todo, dejando claro que la estrategia de fondo seguirá siendo la de oponerse a traslados reglados y continuados, tal como reclamó el presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, el pasado viernes en el Senado.

El propio Marlaska compareció este martes en la Cámara Alta para responder a varias preguntas sobre la inmigración y adoptó una clara posición continuista respecto a su ya conocido rechazo a los traslados a la Península, que contrasta con la apuesta por ellos por parte del ministro de Migraciones, José Luis Escrivá. El titular de Interior aseguró en una respuesta al senador de CC, Fernando Clavijo, que no hay ningún cambio de criterio en la política del ministerio. “Hacemos una política contundente, seria e integral en materia de inmigración, de control de los flujos migratorios y de lucha contra la inmigración irregular”, bases sobre las que, aseguró, “cuando tenemos que modificar o alterar la planificación, lo hacemos con estudios detallados y en los parámetros que he indicado”.

Marlaska no sorprendió a nadie en todo caso al insistir en que “este Gobierno, ni organiza, ni gestiona ningún tipo de viajes o traslados a la Península”, algo que lleva negando oficialmente desde el principio de la crisis y ante las escasas operaciones de este tipo que se han difundido, como la del pasado mes de diciembre a distintas ciudades, para evitar campañas de oposición política en esos territorios, o lo que considera un “efecto llamada” en los países de origen de la inmigración irregular. La respuesta oficial, expresada ayer por Marlaska es que las únicas derivaciones que se están produciendo afecta a personas y colectivos vulnerables, y de aquellas que son beneficiarias de asilo.

De hecho, el ministro mostró este martes una gran confianza en la política migratoria del Gobierno central y, en particular, en la gestión de la crisis que al respecto se está viviendo en Canarias desde hace un año, y ofreció una visión optimista sobre la evolución de la situación, atribuyendo a la estrategia de su departamento la disminución de llegadas de africanos en las últimas semanas, 150 en todo febrero frente al crecimiento del 700% durante el año pasado. “¿Qué está pasando ya en Canarias?, pues que estamos reduciendo en un 10 % las entradas respecto al año pasado. Eso es trabajo, y hacer política migratoria”, resaltó el ministro. “Hacemos cooperación bilateral trabajando con los países de origen y de tránsito; lucha contra las mafias; políticas de retorno de quienes no tienen derecho a la protección internacional, pero también protegiendo a los beneficiarios de ese derecho; y cooperación internacional en el marco de la UE”, explicó el ministro.

Fernando Clavijo, por su lado, expresó su malestar por el hecho de que el ministro no asuma un cambio de posición respecto a la política de traslados, e incluso acusó a Grande-Marlaska de retener a los migrantes “de manera ilegal”, tal como recordó que han señalado diversas organizaciones de derechos humanos. “Estas personas huyen del hambre, de la muerte y de la miseria y usted las está reteniendo en Canarias de manera ilegal”.

El senador de CC aseguró a Marlaska que “pensábamos que habían reconducido su política y habían escuchado a las ONG y a Canarias que por unanimidad les pide que no conviertan a las Islas en la cárcel de la frontera sur de Europa”, pero tras la respuesta del ministro constataba que “con arrogancia, prepotencia y desprecio a los canarios, usted persiste en el mismo error”.