El PSOE pide al ciudadano que vote «con todas sus fuerzas» frente a la abstención que defiende el PP

«El PP quiere recuperar el poder gracias a la abstención» y por ello el lema del PSOE busca en los ciudadanos el efecto contrario: `Vota con todas tus fuerzas´. El secretario de Organización del PSOE, José Blanco, presentó ayer los elementos claves de la campaña electoral socialista para las elecciones del 9 de marzo, en la que pedirán «a la gente que vote con todas sus fuerzas porque enfrente el PP tiene todas las esperanzas puestas en que no vote». Además, Blanco comparó el lema de los populares -`Con cabeza y corazón´- con el de la extrema derecha de Guatemala, `Mano dura, cabeza y corazón´.

Para el secretario de Organización del PSOE, que presentó la campaña electoral de su partido en la sede de la madrileña calle Ferraz, «la gran cuestión» que se resolverá en los próximos comiciones del 9-M es «si deciden pocos o deciden muchos; si triunfa el compromiso democrático, las ganas de futuro y la participación o triunfa el pesimismo y la absención». El PP «quiere que decidan pocos para devolvernos al pasado», mientras que el PSOE quiere «que decidan muchos, para que prevalezca la democracia y la mirada positiva».

«Que la alegría de votar venza a la tristeza de quedarse fuera», proclamó Blanco, que consideró que los populares están haciendo «una campaña dirigida únicamente a sembrar pesimismo y desaliento» para generar «resignación» y «que los ciudadanos se desentienndan y renuncien a su derecho a votar y a decidir». «Para que no ocurra eso hay que acudir a votar, porque cada ciudadano que se quede en casa es un voto a favor de los intereses del PP», aseguró el dirigente socialista, que justificó así el lema elegido por el PSOE para la campaña electoral: 'Vota con todas tus fuerzas'.

Este eslogan se plasmará en 3.500 vallas, 8.000 cabinas telefónicas, 3.000 marquesinas de medios de transporte y 20.000 farolas, superpuesto sobre la imagen del candidato y secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, que aparecerá, igual que en los carteles de precampaña, en mítines o en su despacho, pero nunca mirando de frente a la cámara o en el tradicional posado que hasta estas elecciones ha sido utilizado por los partidos políticos para presentar a sus candidatos en los carteles electorales.