La sexta generación del Mitsubishi L200 está concebido para ofrecer una estabilidad y una tracción máximas. Este nuevo vehículo revoluciona el mundo de las pick up con un diseño que ofrece robustez, dinamismo y estabilidad.
Se trata de una pick up que combina a la perfección la funcionalidad con la deportividad por lo que se adapta a cualquier necesidad. Este vehículo es ideal para el trabajo y para la diversión por las carreteras de Ibiza. Los interesados pueden observar con detenimiento tanto su exterior como su interior y preguntar a los responsables de Talaia Motor sobre sus funcionalidades en de la XIII edición del Salón de Automoción 2019que se celebra este fin de semana en el recinto ferial.
El nuevo motor 220di-D diésel presenta una potencia de 150 cv, con una caja de cambios manual o automática de seis velocidades que aporta un control total en todas las condiciones de conducción. La precisa palanca de cambio manual con un ligero control de embrague facilita y suaviza el funcionamiento del cambio. Respecto al propulsor cumple la normativa Euro 6d-Temp y la WLTP, utiliza Adblue para depurar los gases.
A la hora de conducir fuera del asfalto se puede seleccionar entre las opciones grava, barro/nieve, arena o roca. Basta con pulsar el selector Off Road Mode hasta que aparezca el modo adecuado en el panel informativo del cuadro de instrumentos. La potencia del motor, los reglajes de la transmisión y el frenado se ajustan automáticamente para optimizar el rendimiento en cada superficie.
El interior del nuevo L200 está recubierto de un material que absorbe ruidos y vibraciones. También se cuenta con materiales de amortiguación acústica en la zona inferior de la carrocería y en los pasos de rueda para proporcionar un aislamiento acústico excepcional.
El exterior es muy diferente a su predecesor. Su capó se ha elevado 40 milímetros e incorpora nuevas luces led, tanto en los faros delanteros como en los traseros.
Para ayudar a prevenir colisiones cuando se aparca, una alerta sonora y un aviso luminoso te alertan si los sensores delanteros o traseros detectan un obstáculo cercano. Este sistema también controla la potencia del motor si se acelera súbitamente de forma accidental.
