Medio millón de euros más para la recogida de basuras en Santa Eulària
El Ayuntamiento aumenta en 527.221 euros la revisión de precios del servicio de limpieza de 2024 tras las huelgas de junio y julio de los trabajadores

Último pleno de 2024 del Ayuntamiento de Santa Eulària. / Ayuntamiento Santa Eulària
En pleno ambiente navideño y con miras ya al nuevo año, el último pleno de 2024 en Santa Eulària aprobó por unanimidad un incremento de 527.221 euros en el contrato de recogida de residuos, limpieza viaria y de playas, tras la revisión de precios del programa actual de este contrato. Este incremento está relacionado con la subida salarial que exigían los trabajadores de la UTE Es Vedrà y Herbusa a finales de junio, cuando fueron a la huelga, y que asumió el Ayuntamiento de Santa Eulària junto con los de Sant Joan y Sant Josep.
La subida salarial acordada entre las empresas y los trabajadores fue del 21% en cuatro años, con una subida del 8,5% este 2024. En el caso de Santa Eulària, el aumento de coste del servicio repercutirá en la tasa de basura que pagan los ciudadanos, según señaló la alcaldesa de Santa Eulària en Radio Ibiza, el pasado julio.
«La fórmula mágica»
En su intervención antes de la aprobación, la concejala del partido socialista Beatriz Fernández Olmos aprovechó para denunciar que no se hubiera actuado antes, dado que «el conflicto» entre las empresas y los trabajadores empezó en noviembre del año pasado. Con este dato en cuenta, Fernández quiso «felicitar» a los técnicos de los tres ayuntamientos implicados «por haber conseguido la fórmula mágica [...] Porque al final el grueso de la situación ha recaído en las arcas municipales», algo que señaló que le parece lo adecuado: «El servicio es de este Ayuntamiento, es 100% competencia municipal, y por ello se cobra una tasa a los residentes del municipio», apuntó.
En la misma línea, el concejal de Unidas Podemos, Álvaro de la Fuente Marcos, criticó la forma de negociar del Consistorio por esperar a que se convocara la huelga de basuras en plena temporada y la concejala de Vox, Paula Salsoso Asencio, apuntó que es una «pena que los trabajadores tengan que llegar a una huelga para que el Ayuntamiento se mueva un poco y revise sus condiciones».
A estas réplicas, la concejala de Medio Ambiente y Sostenibilidad, Mónica Madrid García, indicó que el Consistorio intercede «en lo que determina la legalidad y en este caso [...] se trata de un acuerdo entre la empresa y su sindicato». Madrid explicó que «en el año 2012 se aprobó en la comisión de Hacienda la fórmula de revisión de precios que se ha aplicado este año, igual que en 2019, 2020 y 2021», por lo que estos son los costes de incremento de salario que ha asumido el Ayuntamiento.
Carmen Ferrer quiso insistir en que desde 2012 se revisan anualmente los programas «y cuando hay un convenio en la negociación salarial se añade el aumento negociado, y ha habido muchas negociaciones así». Para Ferrer, la huelga «desgraciadamente no se pudo evitar» y recordó que «no fue solamente en Santa Eulària». «Tenemos que estar orgullosos de que las instituciones fuimos parte de la solución [...] y hay que dar gracias a muchas más personas que invirtieron horas para encontrarla», concluyó.
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