José Maria Liu: "Frente a una invasión china, Taiwán tiene un escudo de silicio"

Taiwán es un territorio instalado en un limbo diplomático –Pekín la considera una provincia escindida mientras de facto funciona como un estado soberano sin apenas reconocimiento internacional - y bajo la amenaza permanente de una invasión china. Pero su posición como primer fabricante mundial de semiconductores le conceden un papel estratégico en el tablero mundial . Su representante en España, José María Liu, advierte que el riesgo de guerra con China es real y que las consecuencias internacionales de este conflicto serían muy superiores a las de la guerra de Ucrania.

 - Hace un año que Rusia invadió Ucrania. ¿Cree que el conflicto de Rusia y Ucrania ha empoderado a China en ese nuevo orden internacional que se está dibuja?

-Hay una evidente intención en el régimen de Pekín de querer mostrar su poder hegemónico. Prueba de ello es que en todo el año 2022, en Taiwán registramos un total de 3.445 incursiones de aviones militares chinos. Utlizando como pretexto la visita a Taiwán de la presidenta de la Cámara de Representantes de EEUU, Nancy Pelosi, el pasado mes de agosto , China inició maniobras militares con fuego real en torno a Taiwán. Y como consecuencia de la visita de Pelosi, los aviones militares chinos comenzaron a cruzar la línea media del Estrecho de Taiwán. Con ello, China está tratando de convertir esta situación en habitual y establecer una nueva normalidad que supone un cambio unilateral del statu quo en el Estrecho de Taiwán y, en definitiva, un desafío al orden internacional.

-¿Como se ve desde Taiwán el episodio del globo o de los globos espía?

-Es la última prueba de ese expansionismo hegemónico. Desde nuestro gobierno, creemos que estos casos no deben ser tolerados por la comunidad internacional y que el régimen comunista chino debe cesar de inmediato las conductas de este tipo que causan inestabilidad regional. Al conocerse este tipo de acciones de China, que suponen una violación del espacio aéreo y la soberanía de otro país, los países democráticos comprenderán mejor la agresión que sufrimos en Taiwán con las incursiones provocativas de aviones y barcos militares chinos en torno a Taiwán.

 - ¿Tiene China tiene una ambición de expansión hegemónica en Taiwán?

-El propio Xi Jinping, en el Congreso del Partido Comunista Chino celebrado el pasado mes de octubre, volvió a insistir en que China no renunciará al uso de la fuerza para reunificar Taiwán. Tras lo sucedido en Hong Kong en estos últimos años, con una más que evidente destrucción de las libertades y la democracia, está muy claro que el próximo objetivo de la expansión hegemónica de China va a ser Taiwán. La comunidad internacional debe saber que la República de China (Taiwán) es un país soberano, independiente y democrático. Solo el gobierno elegido directa y democráticamente por el pueblo puede representar a los 23,5 millones de taiwaneses, cuyo futuro solo puede ser decidido por ellos mismos.

- ¿Percibe Taiwán que los ejercicios militares que se repiten son una maniobra intimidatoria o al contrario, que son una amenaza real y hay un riesgo de conflicto?

-Después de lo vivido en Ucrania y tras las represalias de China ante la visita de Nancy Pelosi a Taiwán, podemos afirmar que el riesgo de guerra sí existe. Que haya regímenes hegemónicos, como Rusia y China, actuando de forma similar nos demuestra la necesidad de que los países democráticos trabajemos unidos para pararles los pies a estos regímenes autoritarios y garantizar la paz mundial.

  -¿Qué medidas está tomando Taiwán para protegerse?

-La escalada de amenazas y maniobras militares de China ha conducido a que mi Gobierno haya tenido que adoptar medidas para no doblegarnos y trabajar en la autodefensa para garantizar nuestra seguridad nacional. La más importante y reciente, un nuevo plan de reclutamiento que ampliará de cuatro meses a un año el periodo de servicio militar obligatorio a partir del año 2024, una decisión adoptada con el único objetivo de afianzar la paz y la seguridad de Taiwán. En palabras de nuestra presidenta, se trata de proteger nuestra seguridad e intereses nacionales, mantener la prosperidad y defender nuestro modo de vida democrático y libre para transmitirlo a las generaciones futuras.

- ¿Se prepara Taiwán para la guerra?

-Solo preparándonos para la guerra podemos evitarla y solo siendo capaces de afrontar una guerra podemos prevenirla. Los taiwaneses hemos de tener muy claro que cuanto más unidos estemos, más fuerte y segura será Taiwán . 

- ¿Se siente Taiwán internacionalmente apoyada?

-Por suerte, en Taiwán contamos con un cada vez más sólido apoyo internacional, día a día nos demuestran nuestros países aliados y de ideas afines, de manera muy especial los Estados Unidos y la Unión Europea. El Parlamento Europeo ha mostrado siempre un claro y rotundo apoyo a Taiwán, hasta el punto de haber aprobado en los dos últimos años un total de 25 resoluciones favorables a Taiwán. Y en enero de 2023, ha aprobado dos resoluciones más en las que condena las continuas provocaciones militares de China contra Taiwán y pide que las disputas entre Taiwán y China se resuelvan mediante un diálogo pacífico y sin precondiciones.

- El mundo está pagando las consecuencias de la guerra en Ucrania. ¿Qué repercusión internacional tendría un conflicto entre China y Taiwán?

-Creemos que la repercusión de una invasión china de Taiwán sería muy superior a la que ha causado la invasión rusa de Ucrania. Por eso pensamos que es necesario que la comunidad internacional trabaje conjuntamente para evitarlo y que Taiwán no se convierta en la Ucrania asiática. Ese es nuestro objetivo. Tengamos en cuenta además que Taiwán se ha convertido en el principal proveedor global y en la pieza clave de la cadena de suministro de chips en todo el mundo, pues producimos a hoy el 63 % del mercado mundial de chips. Somos el número uno. Tenemos una compañía sobresaliente, TSMC, que produce el 54% de chips del mercado mundial y de chips avanzados produce el 92%.

 - Tienen ustedes un gran poder con la fabricación de semiconductores. ¿Lo utilizarían para presionar si llegara el caso?

-En Taiwán tenemos esta arma secreta, sí. Aunque las empresas taiwanesas de la industria de los semiconductores pertenecen al sector privado y se rigen por las normas del mercado libre, nuestro liderazgo en este sector nos ha permitido forjar, ante una posible acción militar, ese “escudo de silicio” del que tanto se habla. En una entrevista con la televisión CBS americana el 25 de septiembre de 2022, el Secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, advertía de que si algo sucediera y eso se interrumpe, los efectos que tendría en la economía global podrían ser devastadores.

 - ¿Se siente Taiwán suficientemente apoyada por España?

-El 6 de octubre de 2022 recibimos por vez primera el apoyo explícito del Congreso de los Diputados de España, mediante la aprobación de una Proposición no de Ley en la que el Congreso subraya su oposición a cualquier acción unilateral que socave el statu quo en el Estrecho de Taiwán y reitera que la relación entre China y Taiwán debe desarrollarse “de manera constructiva mediante el diálogo, sin coacción y en base a la voluntad de la ciudadanía”. Tal declaración constituye un valioso hito en las relaciones entre España y Taiwán del que nos sentimos muy satisfechos y agradecidos. Una delegación de 6 diputados del Congreso visitó Taiwán del 10 al 14 de enero de este año con el objetivo de profundizar los lazos bilaterales y ampliar los intercambios en todos los ámbitos. Asimismo, deseamos una mayor cooperación con el poder ejecutivo y esperamos que tal situación se pueda mejorar por el beneficio mutuo de ambos pueblos, el español y el taiwanés.

-¿Qué esperan del Gobierno español?

-Una comunicación con nuestra oficina de vez en cuando para abordar los temas que preocupan a taiwaneses y españoles.

-¿No hay comunicación?

-Hay contactos, pero queremos que sean más fluidos y de de mayor nivel, si es posible. Yo antes de venir aquí fui viceministro de Asuntos Exteriores. Ahora como representante del Gobierno taiwanés en España, con categoría de embajador de mi Gobierno, querría tener más contactos y con funcionarios de más alto rango. Ahora es a nivel de de director general. Aunque no tenemos relaciones diplomáticas, queremos fortalecer más las relaciones sustanciales, las que son de beneficio mutuo. Hay muchos temas que afectan a españoles en Taiwán o a taiwaneses que vienen aquí a hacer negocios.

- ¿Cómo son las relaciones comerciales con España?

-En los últimos años, desde nuestra oficina en España dedicamos grandes esfuerzos a mejorar las relaciones comerciales entre ambos lados. Cada año tenemos un crecimiento de nuestro comercio bilateral. El comercio bilateral entre España y Taiwán fue en 2021 de cerca de 2.500 millones de dólares estadounidenses, con un crecimiento del 39%con respecto al año anterior. Y según la previsión de 2022, estaremos cerca de los 2.700 millones de dólares, lo que supondrá un crecimiento del 8%. Seguiremos manteniendo un superávit favorable a Taiwán de más de 800 millones de dólares, y tratamos de equilibrar la balanza incentivando y aumentando las exportaciones desde España a Taiwán, sobre todo del sector agroalimentario. En los últimos años, por ejemplo, hemos estado trabajando intensamente para exportar a Taiwán los “productos estrella” procedentes de España, como la carne de cerdo, de la que España es ya nuestro principal proveedor mundial, el aceite de oliva, nuestro segundo proveedor, y el vino, nuestro sexto proveedor. Hacemos mucho para equilibrar la balanza comercial y ese un trabajo importante que yo hago. 

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