Guerra de Ucrania

Erdogan media para extender el acuerdo del grano a otros bienes ucranianos y rusos

Moscú necesita incluir sus fertilizantes en el pacto para conseguir dinero con el que comprar armamento | Kiev se abre a esta reclamación rusa siempre y cuando se amplíe la lista de puertos desde los que poder exportar sus productos

Recolección de trigo en la región de Kiev, el pasado mes de agosto.

Recolección de trigo en la región de Kiev, el pasado mes de agosto. / REUTERS

Adrià Rocha Cutiller

El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, sigue siendo el principal mediador, o al menos el más conocido, entre Rusia Ucrania. Tras conseguir hace seis meses desbloquear las exportaciones de grano ucraniano, ahora está peleando para extender y ampliar este acuerdo y conseguir que, a través de su corredor, Ucrania —y Rusia— pueda exportar no solo cereales, sino otros productos alimenticios.

"Ankara y Moscú pueden empezar a trabajar en la exportación de diferentes alimentos, y luego gradualmente de otros productos a través del corredor de grano", le dijo Erdogan el pasado 11 de diciembre a su homólogo ruso, Vladímir Putin. Después de ello, el presidente turco tuvo la misma conversación, pero con el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski.

Desde entonces, Erdogan se ha lanzado a la carrera para extender este acuerdo de cereal ucraniano, que estuvo a punto de romperse en noviembre y que tendrá que volver a ser prorrogado —bajo la amenaza del veto ruso— en marzo.

"Los rusos parecen tener varias intenciones —explica Yörük Isik, experto del think tank Middle East Institute—. Una es que sus aliados puedan tener grano y fertilizante y otros productos a precios accesibles. La segunda es que quieren crear de cara al mundo una imagen de actor razonable, que negocia, que hasta alimenta al mundo".

"Buscan crear una confusión: mientras crean un terror de misiles en las ciudades ucranianas, atacando infraestructura civil, intentan mostrar que están dispuestos a hablar, a participar en procesos internacionales", continúa este experto.

Fertilizantes rusos

Hasta día de hoy, Moscú siempre se ha mostrado escéptica con el acuerdo de cereal ucraniano, e intenta presionar a Europa para que facilite la exportación rusa de grano y fertilizantes

Estos productos no están en la lista de sanciones occidentales, pero su comercio se ha visto interrumpido por el miedo de las compañías internacionales de transporte de trabajar con empresas rusas. "El acuerdo del cereal es un acuerdo complejo, y para su funcionamiento correcto es necesario que se levanten los obstáculos a los productos de Rusia, para que se puedan cubrir las necesidades de los países más necesitados", dijo en un comunicado el Kremlin tras la charla entre Erdogan y Putin. 

"Rusia quiere dinero, por eso su gran deseo es introducir sus fertilizantes en este acuerdo. Conseguirlo crearía una nueva vía para conseguir dinero fresco con el que comprar nuevos componentes para la fabricación de misiles, o pagar otros productos, como los drones iranís. Pero en resumen, la presión económica a corto plazo para conseguir dinero es importante para todas las partes. No solo para Rusia: también para Ucrania y Turquía", considera Isik.

Pese a la ayuda occidental, la economía ucraniana se ha hundido este 2022 a causa de la invasión rusa. Según la estimación del Banco Mundial, el Producto Interior Bruto (PIB) ucraniano descenderá un 33% este año.

Un tercio de los ucranianos son, en la actualidad, desplazados de guerra; miles de hombres han muerto en el frente. Según datos de la ONU6.500 civiles han muerto durante el conflicto. Y después está lo obvio: gran parte del país y sus infraestructuras han quedado completamente destruidas.

"A pesar de todo esto, Ucrania se ha mostrado hasta la fecha favorable a introducir los fertilizantes rusos al acuerdo, siempre y cuando más puertos ucranianos sean incluidos en la lista de lugares desde donde empezar la ruta de exportación por el mar Negro. De esta forma, Ucrania podría exportar más alimentos y otros productos más fácilmente. La intención de Kiev es clara: exportar lo máximo, conseguir el máximo dinero", explica Isik.

Y es aquí, según el experto, donde entra la Turquía de Erdogan, que vive desde hace más de un año sumida en una crisis inflacionaria desbocada. El país anatolio ha sido el segundo país del mundo —solo por detrás de España— que más se ha beneficiado del acuerdo de grano ucraniano vigente. "Una de las mayores motivaciones de Erdogan —dice Isik— es conseguir un acceso prioritario y ventajoso a los productos del acuerdo".

Suscríbete para seguir leyendo