David DePape, el hombre acusado de irrumpir en la casa de la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, y agredir a su marido, Paul Pelosi, ha confesado que su intención era matar al hijo del expresidente Joe Biden, Hunter Biden, al gobernador de California, Gavin Newsom, y el actor Tom Hanks, entre otras personalidades relevantes.

La sargento Carla Gurley, que interrogó al sospechoso durante una hora el día que atacó a Pelosi con un martillo tras irrumpir en su domicilio, ha confirmado que el presunto atacante le confesó que su intención era acabar también con dichos personajes públicos.

Gurley ha indicado, además, que DePape aludió en varias ocasiones al "reinado del mal" en Washington, si bien aseguró que había entrado en la casa de Pelosi para "hablar con ella" y ha insistido ante los agentes en que "no quería hacerle daño".

Sin embargo, fuentes cercanas al asunto han señalado que David Wayne DePape, de 42 años, dijo a Paul Pelosi mientras estuvo en su domicilio que "todos" tenían que ser "eliminados" después de corroborar que Nancy Pelosi era la número dos en línea de sustitución para la Presidencia, detrás de la vicepresidenta Kamala Harris.

Ahora, la Justicia estadounidense ha indicado que existen motivos de peso para seguir adelante con la imputación de DePape, acusado de intento de homicidio y asalto con arma. Así, ha confirmado que está previsto que acuda al juzgado el próximo 28 de diciembre.

Durante la vista judicial del miércoles, la Fiscalía ha presentado audios y vídeos, así como testimonios de investigadores que han dado forma al relato del asaltante y han asegurado que tenía más objetivos.