El secretario general de la OTANJens Stoltenberg, ha aumentado este jueves la presión a Turquía para que el país anatolio levante el veto impuesto desde primavera contra la adhesión a la organización transatlántica de Suecia y Finlandia.

Los dos países nórdicos fueron invitados formalmente a entrar a la OTAN en junio, en una cumbre celebrada en Madrid. Su adhesión, sin embargo, no puede producirse sin que todos los parlamentos de los países miembros lo ratifiquen. Solo quedan dos: el de Turquía y el de Hungría

"Suecia y Finlandia se comprometieron con Turquía a seguir unos pasos y a incrementar su cooperación en materia de seguridad. Y han cumplido con lo que prometieron. Ha llegado la hora de darles la bienvenida como miembros de la OTAN de pleno derecho. Su unión nos hará más fuertes y seguros a todos", ha dicho este jueves Stoltenberg en Estambul, donde se ha reunido con el ministro de Exteriores turco, Mevlüt Çavusoglu. Este viernes, el noruego se reunirá con el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan.

"Finlandia y Suecia han aprobado nuevas leyes de antiterrorismo, y han prohibido la participación en organizaciones terroristas, incluido el PKK —la guerrilla kurdoturca en guerra contra Turquía desde la década de los 80—. Han levantado sus restricciones de venta de armamento que pesaban contra Turquía. Suecia y Finlandia han cumplido", ha dicho Stoltenberg. 

Turquía se resiste

Para Ankara, sin embargo, la historia es distinta. El Gobierno turco aún mantiene su veto: para el Ejecutivo de Erdogan —que el martes de la semana que viene se reunirá con el nuevo primer ministro sueco, Ulf Kristersson— a Suecia y Finlandia les quedan aún pasos que dar. 

"En Madrid, cuando firmamos nuestro acuerdo trilateral, todos destacamos la importancia del memorándum y nuestros compromisos. Pero lo más importante no es a lo que te comprometes, sino lo que implementas. Algunos pasos no han sido realizados. No todos los puntos del memorándum han sido implementados completamente", ha dicho Çavusoglu ante Stoltenberg.

Con esta queja, Turquía se refiere a la deportación hacia Turquía de kurdos residentes en Suecia a los que Ankara considera miembros del PKK. Tras la firma del acuerdo con Suecia y Finlandia, el Gobierno turco mandó una lista a Estocolmo y Helsinki con nombres de personas que Ankara quería que fuesen deportadas. 

Algunos procesos de deportación han sido iniciados; otros son denegados por la justicia sueca. Pese a todo, muchos expertos consideran que el veto de Turquía podría alargarse hasta las elecciones presidenciales de Turquía de primavera de 2023.

Acuerdo de cereal

En su reunión, además, Çavusoglu y Stoltenberg han hablado sobre la continuación del acuerdo por el trigo y cereal ucraniano, que Rusia rompió el pasado sábado pero al que Moscú accedió a volver este miércoles gracias a la mediación de Turquía y Naciones Unidas.

"Quiero agradecerle a Turquía y especialmente al presidente Erdogan por la negociación para permitir el paso seguro por el mar Negro de cargueros con cereal ucraniano", ha dicho el secretario general de la OTAN ante el ministro turco.